El diputado provincial justicialista Héctor Acuña presentó ayer en la Cámara baja un proyecto por el cual se modificaría el sistema electoral en la provincia. La iniciativa contempla la eliminación de las internas abiertas y obligatorias y habilita a que cada partido o alianza presente hasta cuatro candidatos, manteniendo sí el régimen de boleta única. Pese al inocultable tufillo de intentar regresar al sistema de ley de lemas que trae implícito el proyecto, Acuña lo defendió de cabo a rabo, sosteniendo que les devuelve a los partidos políticos "su fortaleza natural" a la hora de consagrar las candidaturas.
"Los partidos o alianzas con representación provincial podrán presentar un candidato, una fórmula y/o una lista de candidatos según corresponda en todos los distritos electorales de la provincia y en todas las categorías en que se realicen las elecciones por cada setenta y cinco mil (75.000) afiliados o fracción mayor de treinta y siete mil quinientos (37.500) con que cuenten y hasta un máximo de cuatro candidatos, fórmulas y/o listas de candidatos por categoría", sostiene en su artículo 3.
Ese artículo deja sin efecto práctico el sistema de internas abiertas, simultáneas y obligatorias, y pone a los partidos o alianzas dirimiendo en una instancia única su interna y, a la vez, la elección general. Hoy, todos los postulantes deben pasar por el filtro de la competencia previa y, de ese modo, quien gana la compulsa interna queda legitimado para la general.
De superar el número de candidatos la limitación establecida (4 postulantes), el partido o alianza inscribirá las candidaturas que hubieran contado con mayor número de avales presentados. La fórmula de gobernador y vicegobernador deberá ser hecha conjuntamente con catorce candidatos a senadores cómo mínimo y con una lista de candidatos completa de diputados. Las candidaturas para intendente deberán ser hechas conjuntamente con una lista completa de candidatos a concejales titulares y suplentes.
Otro artículo clave de la iniciativa peronista aclara que la elección a gobernador y vice, senadores provinciales e intendentes municipales, "se efectuará en forma directa y a simple pluralidad de sufragios". A su vez, "dentro del partido o alianza que obtuviera la mayor cantidad de votos, el candidato y/o la fórmula que hubiere obtenido la mayor cantidad de sufragios sobre el total de los emitidos a favor de su mismo partido o alianza, serán el candidato y/o la fórmula a proclamar".
La demonización. Ayer, en diálogo con LaCapital, Acuña admitió que el proyecto fue elaborado por el actual subsecretario de Puertos y Vías Navegables de la Nación, Ricardo Luján, y despegó al PJ de la iniciativa. "Esto es algo individual que pongo a consideración de todos para que lo enriquezcan. Yo sé que con esto me van a demonizar a mí, pero espero que antes lo lean. No quise comprometer a nadie más del peronismo y es por eso que sólo lleva mi firma. Le digo más: favorece al Frente Progresista y no al peronismo".
Según Acuña, el hecho de haber presentado el texto ahora —cuando recién sería tratado en mayo para la apertura del período ordinario de seiones — revela que "no se quiso hacer entre gallos y medianoche, si a los diputados provinciales nos les gusta, que no lo traten. Y si el presidente del PJ me pide que lo retire, lo retiro".
Semanas atrás, al conocer públicamente la existencia del anteproyecto de "régimen electoral para la ampliación de la participación ciudadana de los procesos electorales" (el larguísimo título del paper), el titular del partido, José Luis Freyre, tomó distancia y lo atribuyó a operaciones mediáticas. Ayer, Acuña lo convirtió en realidad y lo hizo salir a la luz en la mesa de entradas de la Cámara de Diputados.
