Plaza venció a Los Tilos pese a que no mostró un buen rendimiento
La victoria frente a Los Tilos por 32 a 25 (5-1), en el marco de la 10ª fecha del torneo de la Urba, no pareció el resultado más apropiado por lo que se vio dentro de la cancha
26 de junio 2011 · 01:00hs
Hablar de merecimientos muchas veces es meterse de lleno en el campo de la ambigüedad. Porque el que gana, por algo lo hace. Por algún motivo termina inclinando la balanza para su lado. Y ahí juegan su parte los dos equipos. Pesa tanto lo que uno hizo como lo que el otro no supo realizar. Por eso algunas victorias son difíciles de encasillar. El triunfo que consiguió ayer Atlético del Rosario, en condición de local, se puede ubicar dentro de esta suerte de parámetro. Es que la victoria frente a Los Tilos por 32 a 25 (5-1), en el marco de la 10ª fecha del torneo de la Urba, no pareció el resultado más apropiado por lo que se vio dentro de la cancha. Pero el plazón festejó porque pudo prevalecer, aunque fue superado en varios aspectos del juego. Tema cerrado. No hay demasiadas vueltas para darle.
La coyuntura jugó su parte. No puede ser dejada al margen. Plaza, diezmado por algunas ausencias de peso, salió a la cancha con la relajación que le significaba tener la clasificación al Top 14 en el bolsillo. Y el conjunto platense, por el contrario, con la obligación de ganar para mantener vivas sus chances de seguir en la carrera por el título. El cuadro de situación era por demás de claro.
El comienzo fue electrizante. El típico "estudio" de los equipos duró muy poco. Los Tilos madrugó con un try de maul tras una buena obtención en el line. Y el local respondió rápidamente con una buena jugada colectiva.
Después la visita monopolizó la pelota, pero Plaza pudo soportar los embates.
El punto de inflexión se produjo pasado el cuarto de hora. En desventaja, Atlético se erigió en el dueño del trámite. Fue superior y se fue al descanso arriba en el marcador por 21 a 10.
Pero en el complemento la historia cambió rotundamente. Plaza cayó en un pozo, como ya le pasó varias veces en el torneo. Porque salieron a escena viejos errores y distracciones.
Y el visitante lo aprovechó. Se metió la pelota abajo del brazo y golpeó duramente. En nueve minuto marcó tres tries y dio vuelta el resultado: 25 a 24.
El panorama para Plaza no era el mejor. No podía contrarrestar una remontada que era poco imaginable. Y al mismo tiempo se vio beneficiado por una falencia importante de su rival: no convirtió ninguno de los cinco tries de apoyó. Y terminó pagando muy caro esos diez puntos que dejó en el camino.
El local encontró la respuesta en una infracción ajena. Desde el tie Semino puso a su equipo arriba por 27 a 25 y la historia cambió. El golpe tuvo efecto, porque Plazavolvió a apoyar y cerró el partido con cierta tranquilidad.