"Los empresarios tienen la responsabilidad social de mantener el empleo ante
esta crisis internacional y los trabajadores mantener el nivel adquisitivo de los salarios",
planteó el secretario de derechos humanos de la CGT y titular del gremio de los Judiciales, Julio
Piumato, quien convocó a "una multitudinaria movilización de trabajadores", el 30 de abril en
Capital Federal, para "expresar el compromiso" de la central sindical "en reclamar la
profundización del modelo económico iniciado en 2003" ya que "si hubiéramos tenido la política que
imperó hasta 2002 hoy (con la crisis internacional) hubiéramos bajado la cortina".
Piumato vino a Rosario a dar una charla sobre derechos
humanos y constitucionalismo social, a 60 años de la Constitución del 49, y aprovechó para
coordinar con la CGT local el acto del 30 (ver aparte).
—¿Están registrando despidos a causa de la
crisis?
—Un solo despido preocupa porque significa una
familia que se destruye, pero los que se registran no tienen la envergadura que señalan algunos
medios de comunicación, que tratan de hacernos creer que la crisis es nuestra, cuando esto no es
así. Antes del estallido internacional habían desempolvado a viejos gurúes que decían que la
economía argentina era como un Titanic a la búsqueda de su iceberg. Hasta trajeron al representante
argentino en Lehman Brothers para que diga lo mismo. Lo extraño es que no previeron que el que se
iba al fondo del mar no era Argentino sino Lehman.
—¿Hay empresarios que usan la crisis como excusa?
—El "despedir por si acaso" tiene que ver con
empresarios argentinos especulativos, pero también con la intención de las multinacionales y de los
países centrales de exportar las crisis para que los países periféricos sufran las consecuencias.
En los despidos que avizoramos están ambas cosas jugando. En lo local, tiene que ver con esa visión
mezquina: tuvieron un nivel sideral de rentabilidad tras la recuperación económica y ante cualquier
nubarrón prefieren mantener esa rentabilidad y no el empleo, olvidando, que un trabajador, además
de ser humano, es un consumidor. La ecuación económica real debería ser, aunque ganen menos,
mantener el nivel de empleo y de los salarios para que los trabajadores sigan consumiendo. Acá lo
que hay es una nueva tendencia especulativa en algunos casos de mantener las altas tasas de
rentabilidad a cualquier precio. Si bien la acción del gobierno es muy importante porque está
actuando en todos los casos, los trabajadores tenemos que estar movilizados y defender este modelo
porque sería suicida volver al 2001 y 2002.
—¿Habría que volver a la doble indemnización?
—Es un tema que ya (el diputado Héctor) Recalde lo planteó al
comienzo de la crisis, después el gobierno planteó otros mecanismos para evitarlo. En el proyecto de Recalde está previsto el efecto
retroactivo para parar a los que piensen "se viene la doble indemnización, despido por si acaso".
Esas medidas tienen que llegar el día que la cuestión se agrave. Porque acá hay una intención de
agravar la crisis, de aterrorizar, para que la gente baje los brazos y vea como normal todo lo que
se hace en su perjuicio. Creemos que la salida es distinta. Se vio en Semana Santa, que fue un boom
de turismo en todo el país, con todos los destinos y las rutas saturadas. La Argentina está
despierta y en actividad, cosa que no pasaba hace seis años, y encima con esta crisis
internacional. Creo que hay que valorar estas cosas para saber dónde estamos, porque la intención
siempre es transmitirnos la crisis. Los trabajadores debemos vigilar esto, pero fundamentalmente
ratificar un concepto de la CGT: los empresarios tienen la responsabilidad social de mantener el
empleo, y los trabajadores mantener el nivel adquisitivo de los salarios.
—¿Cómo esperan que sea la negociación paritaria?
—Todo depende de las actividades, pero perder no se
puede, porque si los trabajadores pierden, alimentamos la crisis. Hoy que está resentido el mercado
externo, más que nunca el sostén de la economía es el mercado interno. Si el trabajador pierde
poder adquisitivo se achica el mercado, se achica la actividad económica y se genera más desempleo.
Es directiva de la CGT mantener el poder adquisitivo del salario y mejorarlo, pero las paritarias
las define cada federación u organización y cada una sabe la situación de su actividad y lo que
ganaron en su actividad. En algunos lugares están fijando aumentos por períodos menores a un año,
pero ninguno está diciendo "dejamos en cero hasta que aclare".
—¿Qué le plantearán a la presidenta en la reunión del
lunes?
—Hablaremos de estas cosas. Así como acompañamos muchas de las
iniciativas de este gobierno, plantearemos qué medidas de las que hemos venido pidiendo son
imprescindibles para profundizar las políticas nacionales. l