Una escalada de amenazas contra la cúpula del Ministerio de Seguridad fue denunciada en los últimas horas en la Justicia. La madrugada del miércoles, uno de los vehículos oficiales en los que suele desplazarse el secretario de Seguridad Pública, Matías Drivet, fue perseguido de manera intimidatoria durante diez minutos por un VW Bora negro. Y doce horas después, ese funcionario y el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, recibieron mensajes de texto amenazantes con datos muy precisos sobre sus círculos íntimos.
El mensaje fue idéntico y con contenido altamente intimidatorio, y fue recibido de manera casi simultánea ayer a la madrugada por ambos funcionarios. Se trata de textos remitidos a los celulares oficiales del titular de Lamberto y Drivet. El enunciado refiere datos muy precisos sobre la intimidad familiar de Drivet, describe con acierto la flota de vehículos afectados a los funcionarios del ministerio y produce una amenaza hacia los destinatarios del mensaje, autoridades policiales de la provincia y efectivos de una dependencia de la Jefatura de Rosario.
El texto amenazante también hace alusión a los atentados sufridos en su domicilio por el gobernador Antonio Bonfatti el 11 de octubre pasado y el que le costó la vida al empresario ligado al narcotráfico Luis Medina el 29 de diciembre último. Aunque con inexactitud refiere que en los dos hechos se hicieron 14 tiros. En el caso de Medina hubo al menos 18.
Las denuncias fueron radicadas en fiscalías de Santa Fe y Rosario ayer a la mañana. Pero doce horas antes Drivet había hecho una presentación previa por una situación misteriosa y perturbadora que vivieron tres personas en la autopista Santa Fe-Rosario, la madrugada del miércoles, en el vehículo oficial que él mismo utiliza para sus traslados usuales. Durante diez minutos un VW Bora negro se puso a la par sin despegarse casi del automóvil oficial, de la misma marca pero de color gris, que en vano aceleraba y disminuía la velocidad para distanciarse de su perseguidor. Allí viajaban al encuentro en Buenos Aires con autoridades nacionales dos directores del Ministerio de Seguridad. Drivet decidió a medianoche que no viajaría.
Ese incidente oscuro ocurrió a las 3 de la mañana del miércoles y fue denunciado en la fiscalía a cargo de Sergio Alvira. A la madrugada de ayer se registró el nuevo hecho. A las 2.21 un mensaje sorprendió a Lamberto. El mismo texto fue recibido a las 2.22 por Drivet. Un tercer mensaje fue destinado a una persona de la familia de Drivet con un contenido distinto, revelador de detalles de la vida cotidiana del funcionario y también amenazante.
Los SMS. Los mensajes que mandaron a los funcionarios, según las denuncias, dan cuenta de intimidades de la familia de Drivet. Describen los seis vehículos con sus patentes que se utilizan en el ministerio para las principales autoridades. Por último lanzan amenazas y pide que "se dejen de joder" al jefe de policía provincial Omar Odriozola, al subjefe Raúl Ardiles y a "Romero y la banda de Judiciales", en referencia a Cristian Romero, titular de la División Judicial de la Unidad Regional II. También mencionan a Mario Cristaldo, ex funcionario de la unidad de protección de testigos, que es secretario personal de Ardiles.
Los funcionarios del gobierno provincial no aportaron en las fiscalías sospechas explícitas sobre la procedencia de las amenazas. Suponen, según revelaron en sus entornos informalmente, que sectores policiales conectados con grupos de narcocriminalidad pueden estar tras ellas. También de funcionarios de la fuerza sometidos a investigaciones por enriquecimiento patrimonial.
Persecución. El acto intimidatorio ocurrido en el vehículo que debía llevar a Drivet sucedió entre Coronda y Arocena. En el coche que fue perseguido y encerrado viajaban el director de Policía Comunitaria, Juan Manuel Neffen, el director de Planificación y Evaluación Ramiro Arola Lecour. Los conducía un chofer que fue empleado de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE). Estos dos funcionarios siguieron viaje a la ciudad de Buenos Aires, donde se unieron a la comitiva que se reunió con la ministra de Seguridad de la Nación, María Cecilia Rodríguez.
Tras diez minutos de seguimiento deliberado por la autopista, según la denuncia, los perseguidores se alejaron.
Lamberto y Drivet ya habían pasado por una situación similar en septiembre del año pasado a poco de iniciarse la investigación del crimen del líder narco Claudio "Pájaro" Cantero.
Ambos recibieron llamados y mensajes de texto a sus celulares en los que les decían que conocían los movimientos de los funcionarios y sus familiares.
Antes, el pasado 14 de junio, se recibió un llamado en un juzgado luego de que se hallara en la zona sur de la ciudad un depósito con 60 kilos de cocaína. Una voz anónima reveló que se estaban preparando atentados contra el juez de Instrucción Juan Carlos Vienna, el ministro Lamberto y el personal que trabaja en los operativos destinados a perseguir a esos grupos criminales en Rosario.
El 11 de octubre se registró el más grave de los hechos con el atentado a balazos a la casa particular de Bonfatti. No está establecido si los sucesos, todos o algunos de ellos, están conectados, o si sus autores son los mismos. La investigación de ellos no individualizó culpables aunque por el ataque a la vivienda del gobernador hay cuatro personas imputadas y detenidas.
Repudio
Numerosos referentes nacionales y provinciales de diversa extracción política partidaria expresaron ayer su más enérgico repudio a las graves amenazas sufridas por el ministro de Seguridad santafesino, Raúl Lamberto, y el secretario del área, Matías Drivet. Y ratificaron su respaldo a ambos funcionarios provinciales.