Jorge M. tiene 21 años y fue apresado por efectivos de la Patrulla de Intervención Barrial de la policía rosarina la tarde del jueves en inmediaciones de Uriburu y bulevar Avellaneda. Sobre el pibe pesaba un pedido de captura firmado por la fiscal Marisol Fabbro, quien le imputa la ejecución material del crimen del comerciante Mauricio Brandán, ocurrido la noche del sábado 26 de septiembre del año pasado en su pilchería de Provincias Unidas y Pampa.
Mauricio Brandán tenía 32 años y junto a su hermano Cristian eran dueños de la pilchería "Beautiful People", en Provincias Unidas 1584. A las 20 del último sábado de septiembre pasado, Cristian fue hasta un quiosco en busca de una gaseosa y entonces aparecieron cuatro hombres a bordo de dos motos. Los dos que viajaban como acompañantes se bajaron, uno de ellos armado, y entraron al negocio. Todo indicaque Mauricio se resistió a entregar sus pertenencias y forcejeó con uno de los malhechores hasta que un disparo en el pecho le provocó la muerte. Tras ello los ladrones huyeron con el celular de la víctima y algunas prendas del comercio sin alcanzar a sacarle la billetera.
Sospechosos. La investigación encabezada por la fiscal Marisol Fabbro llevó en un primer momento a detener a dos hombres de barrio Santa Lucía: Carlos Emanuel L., de 19 años; y Víctor José B., de 39. También terminó tras las rejas del Irar un chico de 16 años a disposición de la jueza Carolina Hernández. En la audiencia imputativa la fiscal solicitó al juez Carlos Leiva que los acusara de homicidio criminis causa (prevé perpetua) y les dictara prisión preventiva por 8 días. Aunque reconoció que tenía pocos elementos probatorios y que entre ellos estaban los fotofits realizados por dos hermanas y un vecino que vieron huir a los ladrones.
Al declarar, los imputados se declararon ajenos al hecho y las evidencias contra los sospechosos, que no contaban con antecedentes penales y trabajaban en relación de dependencia, los llevaron a recuperar la libertad.
En relación al dato que la llevó a pedir los allanamientos para detener a Carlos L. y Víctor V., la fiscal dijo que salieron de "una persona que no conozco ni tengo el nombre" y que habría confesado su autoría en el hecho a un policía. Según Fabbro, se trataría de "uno de los posibles autores que se encontraría arrepentido por la muerte del comerciante".
Presión y arrestos.PUNCTUATION_SPACEMientras tanto la investigación avanzaba y numerosas marchas se realizaron pidiendo mayores medidas de seguridad y el esclarecimiento del crimen. "La sociedad rosarina está viviendo momentos terribles de inseguridad. Y tanto el Poder Judicial como el Ministerio Público de la Acusación lo están sintiendo. Entonces muchas veces tienen que salir a detener personas para dar respuestas. Existe una presión social trasladada a la Justicia que a veces se trasunta en errores. Para darle una respuesta a la familia, al clamor social, a un barrio, se salió en busca de personas y creo que la Fiscalía se apresuró", dijo el abogado Marcelo Piercecchi, defensor de los primeros acusados.
En tanto, el 9 de enero pasado fue detenido en Pampa y Circunvalación Nahuel Alejandro C., de 19 años, a quien no sólo le achacaron la muerte de Brandán sino también el crimen de Brian Torres, de 23 años y baleado el 10 de enero de 2015 en Pasaje 1756 al 2200, en barrio Santa Lucía. Ese joven permance detenido ya que el juez Luis María Caterina ordenó 30 días de prisión preventiva por homicidio críminis causa.
Lo cierto es que a Nahuel C. ahora se le sumó como sospechoso Jorge M., quien hoy será sometido a una audiencia imputativa en los Tribunales locales.