Una singularidad del nuevo sistema penal es la autonomía de la fiscalía. "El fiscal regional puede disponer las estructuras de persecución según las necesidades y prioridades del momento. Cuando termine mi gestión de seis años, el próximo fiscal regional puede crear otras fiscalías según lo requiera la coyuntura", graficó Jorge Baclini.
Así, la escalada de homicidios dolosos en el departamento Rosario tiene su correlato en la creación de una unidad especial en la que en principio trabajarán 9 de los 34 fiscales que habrá en la ciudad.
—¿Estima que mejorará la tasa de esclarecimiento de crímenes, hoy por debajo del 50 por ciento?
—Va a mejorar paulatinamente. Crear una unidad fiscal de homicidios es poner gente que tarde o temprano va a estar especializada en ese tema y conocerá todos los casos. Relacionar información de todos los casos y conectarlos será una mejora. Poder generar investigaciones unificadas entre cinco casos, por ejemplo, sería un gran paso adelante si se lo compara con el actual sistema de acumulación de causas que no permite ligar los hechos.
—¿Será suficiente?
—Sólo con crear esta unidad ya habrá un mejor estándar de investigación. Además la relación de este cuerpo de fiscales con la policía será mejor, también teniendo en cuenta cambios estructurales como la creación de la policía de investigaciones. Claro que habrá muchas cosas por mejorar, en lo referido a los recursos materiales también. Se requiere actualizar la aparatología para investigar ciertos hechos en función de la tecnología con que cuentan los delincuentes. Hoy la policía trabaja mucho con la intuición pero hay técnicas que mejoran los estándares a la hora de obtener pruebas, testimonios.
—Teniendo en cuenta que los homicidios en Rosario aumentaron un 45 por ciento en un año y que en enero de 2014 se triplicaron los crímenes respecto de enero de 2012, ¿será posible reducirlos?
—El objetivo es reducirlos, pero no será el día 20. En los primeros seis meses no habrá grandes cambios, y si bajan los homicidios será por otra cosa. Pero transcurrido ese lapso deberíamos empezar a generar mejores respuestas.
—Usted suele relacionar el aumento de los crímenes con la impunidad...
—Es una cuestión de lógica: si hay una gama de homicidios con determinada modalidad y no logramos esclarecer esos casos, que por otra parte son los que más crecieron, nadie temerá seguir actuando porque sabrá que hay pocos riesgos de ser atrapado. Si logramos revertir las investigación de estos casos y los esclarecemos, se reducirá la posibilidad de alguien que acepte hacer algo así. Claro que eso sólo no va a solucionar el problema porque tampoco es la impunidad la única causa. Hay delitos que se enmarcan en economías que generan otros delitos. La proliferación de armas de fuego se vincula con el robo de celulares o de motos que también están relacionados con los homicidios. El abordaje buscará que no se investigue un hecho como aislado sino en el marco de una organización o economía delictiva en el que pueda estar inserto.