Hace un par de días algunos medios se hicieron eco del supuesto ataque del que Leonardo Fariña habría sido víctima en prisión. En rigor, lo que hicieron esos medios fue divulgar la denuncia de la abogada de Fariña, Giselle Robles, quien llegó a afirmar que a su defendido quisieron matarlo. Ahora se sabe que nada de eso es cierto: en el juzgado federal donde se investiga a Fariña no hay ninguna denuncia penal por agresiones contra el ex novio de Karina Jelinek y, además, él mismo afirmó a las autoridades del penal de Ezeiza que se encuentra bien y que nadie lo agredió. Al parecer la operación de Robles tenía el objetivo de beneficiar al detenido que comparte celda con su cliente, quien desde hace un tiempo pide ir a otra cárcel y no consigue su propósito. Se ve que algunos abogados creen que tienen licencia para hacer cualquier cosa.
Más que datos vendió humo
El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, dijo hace algunos días que su provincia es una de las que más presupuesto destina a la educación. Pero el dato es falso, según demostró el sitio www.chequeado.com. De acuerdo a los datos del Ministerio de Educación de la Nación, Salta dedica el 28,4% de su presupuesto total a la educación y figura en el puesto 18 del ránking en esa materia entre todas las provincias (Santa Fe es la cuarta). El mandatario salteño también había admitido que su provincia es una de la que menos presupuesto asigna por cada alumno, aunque se quedó corto: en esa ránking en realidad figura última. Una de dos: o corrige sus estadísticas o busca otra manera de promocionar su gobernación.
El ajuste no tiene color político