Scott Weiland, ex vocalista de las bandas de rock Stone Temple Pilots y de Velvet Revolver, murió ayer a la madrugada en Minnesota, Estados Unidos, donde se encontraba de gira con su actual grupo.
Weiland, que tenía 48 años, fue encontrado sin vida en el ómnibus de The Wildabouts, donde estaba durmiendo en la ciudad de Bloomington.
Así se confirmó a través de un comunicado en el perfil de Scott en Facebook: “Murió en sus sueños durante una parada de su gira en Bloomington, Minnesota, con su banda The Wildabouts. Pedimos por favor que se respete la privacidad de la familia de Scott en este momento”.
Hasta el momento, no ha trascendido la causa de muerte.
La influencia del cantante fue notable en la música moderna de Estados Unidos, formando en 1988 en California la banda Stone Temple Pilots, junto a al bajista Robert DeLeo, al guitarrista Dean DeLeo y al baterista Erik Kretz, con quienes compuso piezas memorables como “Interstate Love Song” o “Big Bang Baby”. La carrera de Stone Temple Pilots surgió a la par de Nirvana, Pearl Jam, Soundgarden y Alice In Chains, otros de los grupos que marcaron un antes y un después en el rock y que pertenecían a la Costa Oeste de Estados Unidos, región de donde también provenían, por aquella época, Faith No More y Kyuss.
Alto, flaco como una espiga, y de barba corta y desprolija, Weiland deslumbró con su baile al público argentino en sus dos conciertos de 2007 con Velvet Revoler, banda que armó con el ex Guns And Roses Slash, y con sus shows de 2010 y 2011 tras reunir nuevamente a Stone Temple Pilots.
Desde que empezó con la música, la figura del fallecido cantante estuvo vinculada constantemente a las drogas y a su adicción a la heroína, llegando a pasar varios años, en forma intermitente, en rehabilitación, tras lo cual salía y volvía al rock y a los excesos.
Dueño de un temperamento impredecible, tanto sus compañeros de STP como los de Velvet Revolver (también formaban parte los ex Gun’s Duff McKagan y Matt Sorum y el guitarrista Dave Kushner) tuvieron que echarlo más de una vez, debido a su falta de profesionalismo para llevar adelante proyectos.
Este año, consultado sobre la muerte de Cobain, que estuvo en rehabilitación en la misma época que él, Weiland contestó con una canción de Don McLean: “Ahí estarán, el día que muera, todos esos momentos de muerte del rock and roll. Y esa será la muerte de nuestra generación de rock and roll”.
Slash publicó en su cuenta de Instagram: “Mal día: QEPD Scott Weiland”, junto a una foto del cantante, al igual que lo hizo Kushner. “Estamos profundamente mal por la pérdida de nuestro viejo amigo y compañero de banda. Pasamos un buen pedazo de nuestra vida con Scott, e incluso en su etapa más oscura, nosotros tuvimos amor y esperanzas por él. Su arte vivirá en nosotros, de eso no hay ninguna duda”, escribió McKagan.
Otro de los que se hizo eco del deceso de Wailand fue el modisto estadounidense John Varvatos, quien posteó: “Muy mal día. Estamos muy mal por haber perdido a un amigo del rock and roll y del alma. Siempre serás echado de menos”.
A la tropa de colegas que lo recordaron se sumaron el ex Nirvana Krist Novoselic, el ex Skid Row Sebastian Bach, el guitarrista Joe Satriani, Alice Cooper, Chris Rock, el Mottley Crue Tommy Lee y el grupo Papa Rouch, entre varios más.
Detrás de sí, Weiland dejó 9 discos con Stone Temple Pilots, 2 con Velvet Revolver, 1 con The Wildabouts, 4 solistas, 10 bandas sonoras y la certeza de haber participado de una movida del rock que todavía hoy sigue influeyendo a generaciones de músicos que vieron en Stone Temple Pilots y el grunge una nueva forma de rockear.