Varias decenas de miles de venezolanos colmaron el centro de Caracas, el mismo día en que el presidente Hugo Chávez no pudo asumir un nuevo mandato, debido al grave estado de salud que lo mantiene internado en Cuba desde hace un mes. El acto intentó sustituir la ausencia y juramentación del caudillo, y consolidar al vicepresidente Nicolás Maduro como cabeza del gobierno en el nuevo período que dio comienzo. La oposición criticó con dureza el acto, que de hecho mantiene en sus cargos a los que eran funcionarios designados del período presidencial que terminó ayer (2007/2013). Maduro no es un vicepresidente elegido en las urnas Fue designado por Chávez después de la victoria que logró en las elecciones del 7 de octubre pasado.
La postergación indefinida de la juramentación de Chávez —la primera vez que esto sucede en la historia del país— deja en evidencia la gravedad del estado de salud del militar, quien no ha sido visto ni escuchado desde que anunció hace un mes que debía ser operado de emergencia en La Habana por cuarta vez en 18 meses. A Chávez lo aflige un cáncer de tipo no precisado por el gobierno venezolano, pese a los partes de prensa que suministra desde que se realizó la cirugía, el 11 de diciembre pasado en La Habana.
Arenga. "¡Comandante: aquí hay un pueblo leal que lo eligió, que lo defiende y que hoy ha venido con la Constitución en la mano a hacer un juramento colectivo!", exclamó Nicolás Maduro, con un ejemplar de la carta magna en alto al dirigirse a los miles de chavistas que se congregaron convocados por el Ejecutivo, que de hecho él comanda.
Altos funcionarios y varios mandatarios, como el presidente boliviano Evo Morales, el nicaragüense Daniel Ortega y el uruguayo José Mujica, acudieron para respaldar a Maduro en su estreno internacional como heredero político de Chávez, pese a lo polémico de la decisión tomada por la cúpula chavista en ausencia de su líder. Para muchos analistas y ciudadanos, es claro que la Constitución venezolana ordena, en su artículo 233, que si el candidato electo no se presenta a jurar el cargo, la presidencia queda temporalmente en manos del titular del Legislativo, quien debe convocar a nuevas elecciones.
Argentina, aliada con Chávez desde 2003, envió al canciller Héctor Timerman (ver sección Política). fue llamativa la ausencia de varios mandatarios latinoamericanos, en especial del ecuatoriano Rafael Correa, y de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.
Un mes de ausencia. "Hoy hace 30 días de la operación del presidente Chávez, quien está enfrentando una batalla. Le decimos desde aquí, comandante continúe su batalla, que aquí tiene un gobierno bolivariano y un pueblo revolucionario respaldándolo", dijo Maduro en su encendido discurso. El vicepresidente no escatimó amenazas para la oposición. Advirtió con acciones "muy contundentes" si la oposición intenta desconocer su nueva autoridad. Recordó que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) emitió anteayer una sentencia que avala al gobierno. "Estamos evaluando acciones muy contundentes, porque si no me reconocen, yo no estoy obligado a reconocerlos. Cuidado con acciones golpistas y desestabilizadoras, se los decimos", amenazó Maduro. Más tarde llegó la respuesta del gobernador de Miranda y líder de la oposición, Henrique Capriles. A través de Twitter comentó: "Nos causan gracia las amenazas de segundones, a ver si a partir de mañana se ponen a trabajar. ¡Gobierno paralizado!". Capriles destacó que durante el acto en Caracas el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, no intervino.
El uruguayo Mujica habló brevemente y dijo: "Hay un hombre que está dando una batalla por la vida, que está en el corazón de ustedes, eso es lo que tiene sentido, pero si mañana no está, unidad, paz y trabajo".
Con un "¡Hasta la vida siempre!", Chávez se despidió hace un mes, al partir el 11 de diciembre pasado hacia Cuba para operarse por cuarta vez de un cáncer que se inició en la zona pélvica según informó en julio de 2011 el propio Chávez. Desde su última cirugía, descripta oficialmente como compleja y delicada, su estado es considerado "estacionario", aunque se admitió que sufrió una insuficiencia respiratoria producto de una infección, según la poca información médica oficial que se maneja.
El acto que presidió Maduro fue la culminación de una marcha hacia la casa de gobierno, el palacio presidencial de Miraflores, que paralizó la ciudad, pues salió de varios puntos de Caracas y fue alimentada por seguidores del gobierno que llegaron en ómnibus de ciudades vecinas y lejanas de la capital. El acto intentó sustituir a la sesión de la Asamblea Nacional (Paralamento unicameral) que debía realizarse ayer para la investidura de Chávez, y le permitió al gobierno dirigido por Maduro presentarse como encargado del nuevo período presidencial que arrancó ayer, eventualmente hasta 2019. En caso de fallecimiento de Chávez debería convocar a nuevas elecciones.
Convocatoria opositora.En protesta por la decisión del Tribunal Supremo de Justicia, diputados opositores convocaron a una marcha el próximo 23 de enero —día que marca el fin de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez en 1958— "por el restablecimiento de la defensa de la Constitución".
Chávez cuenta con un permiso de la Asamblea Nacional, de mayoría oficialista, para ausentarse del país. El TSJ rechazó que hubiese que declarar la "falta temporal" del presidente , que puede extenderse. Capriles aceptó el fallo, pese a tacharlo de una "respuesta a un interés político".
EEUU, por una transición normal
Estados Unidos espera que cualquier transición política que ocurra en Venezuela sea democrática y transparente, y que incluya a todos los venezolanos, declaró la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland. Washington, que ha mantenido contactos directos con el gobierno de Hugo Chávez en este mes, ha hecho ofertas concretas para mejorar la relación bilateral pero aún es demasiado pronto para avanzar en ese proceso, informó Nuland.