Montevideo. — El presidente uruguayo, José Mujica, dijo ayer en su primer
discurso frente a las fuerzas armadas que carga una "mochila", en alusión a su antigua etapa de
guerrillero y a los trece años que pasó en prisión, pero que no pretende saldar cuentas del pasado
desde el poder. El flamante mandatario uruguayo comenzó ayer su gestión al frente del segundo
gobierno consecutivo de izquierda participando de la asunción de su gabinete, en el que se destacan
ex guerrilleros y un ministro de Economía moderado que mantendrá la continuidad.
Mujica concurrió temprano al ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca donde
impuso en su cargo a Tabaré Aguerre un productor arrocero, políticamente independiente.
Posteriormente, se dirigió a los otros ministerios para completar la actividad, con Luis Almagro,
ministro de Relaciones Exteriores. En los planes del desarrollo agropecuario se apoya parte de las
políticas a emprenderse y son el sostén de la economía, en especial el rubro carnes donde Uruguay
exporta por cifras de hasta 800 millones de dólares.
Como forma de llevar tranquilidad a mercados e inversores, el Ministerio de
Economía estará a cargo de Fernando Lorenzo, quien ocupó la asesoría macroeconómica en la gestión
pasada. El economista, de 50 años, es un hombre de confianza del vicepresidente, Danilo Astori,
anterior ministro de Economía y quien estará encargado de supervisar los números del país en el
gobierno de Mujica.
Pero, es en los dos ministerios de la seguridad interna y externa del Uruguay se
concentró el interés de la composición del elenco ministerial de 13 carteras con la asunción de
Luis Rosadilla como ministro de Defensa y Eduardo Bonomi, como titular del ministerio del Interior.
Ambos son tupamaros, al igual que Mujica, cuyo movimiento intentó tomar el poder por las armas en
las décadas del 60 y comienzos del 70.
Compromiso democrático. Mujica no aludió directamente en sus discursos a
aquellos tiempos del pasado, sino que reafirmó su compromiso democrático y constitucional.
Rosadilla, por su actividad como tupamaro estuvo preso desde diciembre de 1973 hasta 1982. Sus
principales metas, según ha declarado, son es poner en práctica una nueva ley de defensa nacional,
mejorar la situación salarial de los soldados y tratar de contemplar los reclamos de las fuerzas
armadas de mejores presupuestos. "La vida se vive con coraje y hacia delante. Cada cual tendrá que
cargar con su mochila, pero las mochilas no son ejercicio de saldar cuentas cuando hay que
construir", afirmó Mujica, en evidente alusión al violento pasado político en el país. "No somos
aficionados a vivir de la nostalgia ni de páginas amarillas, todos los días amanece, la vida
comienza. Siempre estamos comenzando", añadió en declaraciones a la prensa.
Bonomi, en tanto que asumirá el ministerio del Interior, es sindicado como uno
de los más estrechos colaboradores de Mujica y también estuvo preso desde 1972 a 1985 cuando se
dictó una amnistía a subversivos y presos políticos. Las prioridades que ha mencionado son la
construcción de nuevas cárceles para superar el hacinamiento que se registra en la actualidad con
más de 8.000 presos, otorgar mayor preponderancia a la inteligencia en el combate contra las drogas
y mejorar la seguridad del país, afectada por la violencia delictiva.
Reunión con Chávez. Por otra parte, muy temprano Mujica se entrevistó con su
colega venezolano, Hugo Chávez, quien llegó el lunes al país para asistir a los actos de asunción
de mando.
Luego de esa reunión, se anunció oficialmente que el flamante mandatario tiene
previsto viajar a Venezuela a fin de mes para "agilizar" las relaciones comerciales, y trascendió
que planea un próximo encuentro con su par de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y espera visitar
pronto Bolivia, Argentina y Chile. "Venezuela necesita alimentos y nosotros precisamos energía",
dijo Mujica, quien consideró importante en ese futuro encuentro aceitar los mecanismos "para
agilizar las relaciones recíprocas".
En cuanto al saliente presidente Tabaré Vázquez, que es médico, volvió ayer a su
antiguo trabajo como jefe del servicio de oncología en una mutual de Montevideo.
Aval opositor
Tras el llamado de Mujica a propiciar una amplia
concertación con los sectores de la oposición, los principales dirigentes políticos uruguayos
expresaron ayer, con matices, su apoyo al nuevo gobernante. Luis Lacalle, Jorge Battle y Pedro
Bordaberry destacaron la voluntad de diálogo del nuevo presidente.