Nueva Chicago y Unión igualaron 2-2 en el estadio República de Mataderos, en un partido que resultó vibrante por sus cuatro gritos y las clarísimas situaciones de gol que desperdiciaron ambos equipos.
Apenas comenzó el encuentro, a los 2’, el local abrió el marcador a través de un cabezazo de Lucas Aveldaño. A partir de ese momento, Unión, que esperó en su campo con sus líneas bien juntas para recuperar el balón y salir de contraataque, contó con las llegadas más claras. En casi todas esas salidas rápidas los Tatengues encontraron a Chicago mal parado en defensa, dejando muchos espacios. Y así llegó el empate, a los 14’, cuando Enrique Triverio superó a Sánchez con una definición por abajo y al lado del palo izquierdo del uno. A los 20’, Gamba bajó un pelotazo largo dentro del área de Chicago, y definió de manera exquisita por sobre Sánchez, que nada pudo hacer.
En el segundo período, el árbitro Pedro Argañaraz le dio un dudoso penal a los de Mataderos, viendo mano en una jugada en la que el defensor parece no haber tenido intención de jugar el balón con su brazo. Y Ramón Lentini, desde los doce pasos, igualó el encuentro con el 2 a 2 final.