La asamblea general realizada el viernes en la Asociación Empleados de Comercio decidió por unanimidad revocar el mandato a su dirigente, Rubén Ghioldi. La semana próxima el consejo directivo evaluará la expulsión total del gremio y de la obra social.
Más de 600 miembros del sindicato de empleados de comercio decidieron, por unanimidad, poner fin a los 43 años de conducción de Ghioldi. La decisión fue el resultado de una investigación judicial que demostró el incumplimiento de deberes y obligaciones que indicaba el estatuto.
Luego de la contundente decisión colectiva, quedó a cargo de la dirección de la entidad gremial Víctor Trovato.
Este es el final de un proceso que comenzó el 19 de diciembre pasado, cuando el directivo fue denunciado ante la Justicia por haber utilizado fondos para gastos personales, entre otras imputaciones.
La Justicia ordenó una auditoría contable en abril, y se encontraron más pruebas contra el legendario dirigente.
Ante esto, la Justicia decidió la separación del cargo durante 45 días hasta que se convocara la asamblea general, reunión que se realizó anteayer con un resultado unánime: echarlo definitivamente de la conducción.
Según manifestaron algunos asociados, "Ghioldi se apropió del poder y durante 43 años no permitió que hubiera otra lista más que la de él. Hizo cosas buenas y si se hubiera ido a tiempo, lo hubiera hecho con laureles, pero al afincarse en el puesto echó todo a perder".
En tanto, la comisión directiva recibió el viernes una carta documento del propio Ghioldi repudiando la asamblea y señalando que "él era el único que podía convocarla".
Por Alicia Salinas
Por Matías Petisce
Por Florencia O’Keeffe