El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, replicó ayer los cuestionamientos de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y envió un mensaje al interior de la Justicia, al advertir que el Poder Judicial "no es popular" y debe "poner límites" sin ceder ante las "presiones", al mismo tiempo que proclamó: "Es tiempo de terminar con la impunidad".
En su discurso de apertura del Año Judicial, Lorenzetti tuvo la oportunidad de responderle a Cristina luego de que el pasado domingo la mandataria acusara a un sector de la Justicia de conformar un "partido" independiente de la Constitución y responsabilizara a la Corte por la demora en el inicio del juicio por encubrimiento en la causa Amia, así como por inacción en la investigación por el ataque a la Embajada de Israel.
"No toleraremos ninguna acción extrema que ponga en riesgo el Estado de Derecho", enfatizó el titular del máximo tribunal y agregó: "Debemos preservar la democracia. Es algo demasiado importante como para dejarla en manos del odio, de la división y del egoísmo".
Lorenzetti también subrayó que los jueces "no gobiernan ni deben gobernar" sino que están para "dictar sentencias" y "proteger derechos" y subrayó que "las instituciones no funcionan bien cuando los que están a cargo hablan del poder y los ciudadanos de sus problemas".
"Somos partidarios del activismo judicial, pero lo hemos escrito en muchas decisiones: no se gobierna. Los jueces tienen muchas ideas y no está mal que las tengan. Los jueces y juezas no viven fuera del ambiente político, religioso", subrayó Lorenzetti y agregó: "El Poder Judicial debe poner límites y eso no sustituye la acción de gobierno. Significa que no hay poderes ilimitados".
En ese marco, instó a "respetar las instituciones, el Poder Judicial, el Congreso y también la figura presidencial".
Especulación política. Remarcó que "lo que esperan las víctimas es que los poderes cooperen para solucionar problemas" y que "lo otro es mera especulación política que no sirve", por lo que agregó: "Cada uno debe cumplir su rol. Es función de los jueces llevar los procesos juzgando a los responsables en forma imparcial, sin flaquezas, sin ceder a las presiones. No hay nadie demasiado poderoso cuando nos ilumina la idea de Justicia".
"El juez debe ser imparcial y hacer que la ley es igual para todos, sea poderoso o débil. Los jueces deben aplicar las leyes para todos, estén quien esté (en el poder)", apuntó e instó a "respetar las instituciones, el Poder Judicial, el Congreso y también la figura presidencial".
"El Poder Judicial nunca será popular. Sería un error que los jueces busquen la popularidad. El Poder Judicial no debe perseguir la aprobación de las mayorías momentáneas, sino el prestigio", insistió.
Lorenzetti hizo eje en puntos centrales como "la preservación de la democracia", pidió "respetar la división de poderes" y subrayó: "Es bueno que las sentencias sean criticadas por parte de funcionarios, ciudadanos o periodistas, eso enriquece. Pero muchas veces no criticamos el argumento, sino que deslegitimamos al emisor, diciendo que el juez no es independiente, que responde a tal o cual. Eso no es bueno en el debate democrático".
También habló del narcotráfico, de los derechos del consumidor y celebró la sanción del Código Civil y Comercial por parte del Congreso nacional; el medio ambiente ("tenemos que ver como hacer para armonizar el desarrollo con la protección ambiental"); la participación de la sociedad en los procesos; y la gobernabilidad.
"Hemos dicho que gran parte de los problemas y tensiones que se viven en el mundo tiene que ver con las instituciones que han sido diseñadas en el siglo XIX, con modelos teóricos del XVII o XVIII y no funcionan en el XXI", subrayó. Lorenzetti.