Un hombre de 24 años fue asesinado de dos balazos y como acusado del crimen fue detenido un joen de 18, hijo de un suboficial de Gendarmería Nacional, que empleó el arma de su padre para cometer el ataque, luego de ser herido a puñaladas por la víctima en la localidad misionera de Oberá.
El joven asesinado se llamaba Gabriel Ferreira, mientras que la identidad del detenido no fue suministrada por orden judicial.
El incidente se produjo el domingo a la madrugada en el barrio Villa Martos, de Oberá, cuando tras una discusión Ferreira aparentemente atacó con un cuchillo al joven, al que le provocó dos cortes a la altura del abdomen, según informó la policía.
Según el relato policial, el herido extrajo entonces una pistola 9 mm y le disparó a quemarropa, causándole la muerte en el acto, ya que uno de los disparos impactó en la cabeza de Ferreira.
Los jóvenes se habrían citado en una vivienda del barrio Villa Martos de esa localidad, para tratar sobre la venta de un arma, pero se desconocen los motivos por el cual terminaron agrediéndose mutuamente.
Lo que sí se pudo confirmar es que el arma empleada en el crimen, que fue encontrada enterrada muy cerca del lugar, pertenece al padre del acusado, quien se desempeña como suboficial en el Escuadrón de Gendarmería de esa localidad.
El comisario Carlos Riveros, del departamento de prensa de la policía de Misiones, confirmó que Ferreira tenía antecedentes y denuncias varias por hurto, robo y amenazas y que era muy conocido en las comisarías de la región por estar involucrado en varios delitos contra la propiedad, según informó el funcionario policial.