El ya dividido movimiento obrero argentino entró ayer nuevamente en estado de ebullición cuando Oscar Lescano, uno de los referentes del sector de los Gordos, anunció su alejamiento de la CGT cercana al gobierno que conduce Antonio Caló por diferencias surgidas con las candidaturas para las elecciones legislativas.
Lescano hizo el anuncio luego de las críticas que recibieron los referentes de los grandes gremios por la candidatura de uno del dirigente de la Sanidad, Héctor Daer, a diputado nacional por el Frente Renovador de Sergio Massa.
De inmediato, el secretario general de la CGT Azopardo (enfrentada al gobierno), Hugo Moyano, dejó de lado sus fuertes diferencias con Lescano y dijo que "tiene las puertas abiertas" para incorporarse a la central que conduce.
Por su parte, el titular de la Asociación Obrera Textil (AOT), Jorge Lobais, cuestionó a los dirigentes del sector que integra Lescano, a quienes acusó de que "se ofenden por cualquier cosa y hacen lo que se les cantan las guindas".
Inorgánico. De todos modos, otro de los Gordos, quien pidió reserva de su identidad, le dijo a la agencia de noticias NA que la decisión del titular de Luz y Fuerza no es orgánica, al punto que el propio Lobais anticipó una reunión la semana próxima para debatir la situación.
En esta línea contemporizadora se expresaron también el propio Caló —en forma reservada— y el líder de los trabajadores de la Construcción, Gerardo Martínez.
La primera piedra la habían arrojado Caló y otros dirigentes como Omar Viviani, quienes dijeron que los Gordos serían separados de la mesa chica de la CGT por el acercamiento a Massa.
Ayer Lescano pateó el tablero al declarar públicamente que abandonará la CGT que lidera el metalúrgico Antonio Caló.
Partidismo. Lescano consideró que Caló "está priorizando la defensa partidista antes que los intereses de los trabajadores", y resaltó la decisión del intendente de Tigre, Sergio Massa, de elegir a un sindicalista como Héctor Daer para integran la nómina como candidato a diputado nacional por el Frente Renovador.
En numerosas declaraciones, el dirigente solicitó a los dirigentes gremiales que dejen de "boludear" y "defiendan a la gente", al tiempo que cuestionó que la presidenta Cristina Fernández "no le dé bola al movimiento obrero".
"Nos vamos ir, yo no voy más. No sé qué harán (Armando) Cavalieri (Empleados de Comercio) o (Carlos) West Ocampo (Asociación Trabajadores de la Sanidad Argentina), pero yo no voy más. Caló y los que están con ellos están priorizando la defensa partidista antes que los intereses de los trabajadores", indicó, al tiempo que no descartó que pudiera recalar en la CGT que conduce Moyano.
Al respecto afirmó: "Vamos a la unidad, hagámosla. Tiene que haber una CGT que tenga participación activa, particularmente teniendo en cuenta que el movimiento obrero tiene que estar en las grandes decisiones que se hacen en el país".
Por los trabajadores. El titular de Luz y Fuerza remarcó a su vez que "la CGT es pluralista y debe defender los intereses de los trabajadores, no defender únicamente a un gobierno y ser adicta al gobierno", al tiempo que cuestionó la candidatura del oficialismo por parte del dirigente de Smata Oscar Romero "porque no consultaron a la central sindical".
"Somos pluralistas. Puede haber comunistas, radicales, conservadores, peronistas. Cualquiera puede entrar, siempre y cuando tenga el respaldo de la gente. No es como dice Viviani que a Daer no lo vamos a dejar entrar a la mesa chica porque es partidista. ¡Está loco!", precisó Lescano.
Buen pronóstico. Asimismo, evaluó que "como Massa va a hacer una buena elección" tendrán a un gremialista "en el Poder Legislativo", algo que —denunció— el gobierno no se los dio.
"El Frente para la Victoria no me lo da. Yo voy a seguir apoyando la gestión de gobierno, pero voy a apoyar la lista donde hay un candidato del movimiento obrero", explicó Lescano.
Lobais salió a cuestionarlo al remarcar que los referentes de ese sector sindical "siempre hacen lo que se les cantan las guindas".
"La semana que viene nos vamos a juntar para ver qué hacemos. No puede ser que estés de un lado y a los seis meses te pases para el otro. Si se quiere ir con (Hugo) Moyano, que se vaya, pero esto está pasando de castaño a oscuro", exclamó Lobais.
Cantan las guindas. El referente del sector gremial conducido por Caló consideró luego que "cualquier motivo sirve para que los Gordos se ofendan y después siempre hacen lo que se les canta la guindas".
Para Lobais, no habría inconvenientes que en referentes sindicales sean candidatos por distintas listas, pero se mostró molesto por el tono rupturista de Lescano.
"Parecemos chicos que nos vamos porque no nos dan espacios en las listas. Seguimos con la huevada", sostuvo.
Anticipó que la semana próxima "martes o miércoles" se hará una reunión de la CGT de Caló para analizar la situación: "Nos vamos a juntar en masa y después veremos si hacemos una reunión de mesa chica o de consejo directivo completo", precisó.