La reestructuración de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) y el anuncio de que finalmente las localidades beneficiadas con nuevos accesos desde la autopista Rosario-Santa Fe serán la ciudad de Puerto General San Martín y la comuna de Timbúes, fueron los temas centrales que desarrolló el titular del ente provincial caminero, Juan José Bertero, durante una entrevista a LaCapital en la que además defendió con firmeza el proyecto de establecer una tasa de 32 centavos a cada litro de combustible que se venda en la provincia para aplicarla a obras viales. "No es un impuesto, es dinero que vuelve en obras de mantenimiento", enfatizó.
Sobre el rediseño de esta dependencia, Bertero señaló que "en dos años de gestión, trabajamos puertas adentro para tener una gestión acorde a los tiempos que vive la provincia; aprobamos un nuevo organigrama y una nueva estructura en la que participó el Sindicato de Trabajadores Viales y en el primer año de labor organizamos un plan maestro de obras viales a 20 años", contó.
Según Bertero, "con estos cambios también pasamos a tener 10 jefaturas zonales en vez de nueve, sin más presupuesto y con una mejor redistribución de los recursos para estar más cerca de las rutas y de la necesidad de la gente".
Tasa."Esto se vincula con el problema de la tasa vial", manifestó Bertero. "Vialidad debe desarrollar y mantener una red de 4.500 kilómetros de rutas asfaltadas y 9 mil de rutas de tierra que constituyen su patrimonio vial. De los 4 mil kilómetros asfaltados, hay un 20 por ciento —unos 900—, en estado crítico. Llevamos esos reclamos al Consejo Federal Vial y allí insistimos en que las rutas santafesinas ya tienen un tránsito federal, con camiones que vienen de todas partes para las cosechas, con un corredor bioceánico que nos atraviesa y rutas sobreexigidas.
Apoyándose en datos técnicos de un documento de la DPV, el funcionario señaló que "reparar una ruta cuesta entre 2 y 3 millones de pesos por kilómetro y pasar un corredor de tierra a ruta pavimentada, aproximadamente 10 millones de pesos por kilómetro, cifras que están muy por arriba de los propios presupuestos de vialidad. Esto lo plantearnos ante el Consejo Federal Vial para modificar la distribución del impuesto a los combustibles".
Apenas trascendió el proyecto del senador Rasetto, tanto la Federación Gremial del Comercio e Industria, algunos sectores del Justicialismo y el Pro y hasta del radicalismo expresaron su rechazo con argumentos como el del traslado del aumento de combustible a los precios o señalando que ya existen tributos para mejoramiento de las rutas.
Ante este razonamiento, el director de Vialidad reconoció que efectivamente hay un impuesto nacional a los combustibles, pero afirmó que del total recaudado apenas un 14 por ciento se distribuye entre todas las vialidades, o sea que es poco y llega poco a las provincias. Además, eso es un impuesto y nosotros proponemos una tasa que se cobra contra una prestación que es el mantenimiento de rutas".
Bertero también defendió el proyecto señalando que "a diferencia de la tasa de Córdoba, este proyecto plantea una fórmula de cálculo que determina cuánto cuesta reparar un kilómetro de ruta y cuántos kilómetros se pueden construir. Es cierto que la Justicia nacional estaría por pronunciarse en contra de la propuesta cordobesa porque no está clara la figura de tasa, pero nosotros establecemos un método de cálculo que contempla la ley". Y remarcó un aspecto positivo del proyecto: "Sobre un monto de entre 700 y 900 millones de pesos, un 30 por ciento del dinero recaudado se destinará al cuidado de caminos comunales, que suman unos 100 mil kilómetros más ".
Bajadas. El titular de Vialidad Provincial efectuó también importantes anuncios en materia de obras para la zona del cordón industrial norte de Rosario. El ente provincial definió que las nuevas trazas para las "bajadas" de la autopista Rosario-Santa Fe finalmente se construirán en jurisdicción de Puerto General San Martín y Timbúes.
La obra solucionaría todo el acceso al área portuaria norte de Rosario y vincula desde la ruta provincial 25 —conocida como el "camino de la Cremería"— y descomprime el tránsito de toda la ruta provincial 10 y la nacional 11, que atraviesan Timbúes y parte de Puerto San Martín", indicó el funcionario que fuera ministro de la Producción del gobierno de Binner.
"En el 2013 trabajamos intensamente con los gobiernos de las localidades de la región, las Bolsas de Comercio de Rosario y Santa Fe y con la cámara empresaria de San Lorenzo para consensuar los proyectos. En realidad no se trata de una derivación de la autopista sino de una traza nueva. El objetivo es que la ruta nacional 11 se transforme en una avenida de conexión interjurisdiccional. Las localidades de allí han cedido sus caminos comunales para que esto pase a ser la traza de una ruta provincial y a partir de ahora se trabaja en un esquema de financiamiento para dar inicio de obra", finalizó.