Pese al esfuerzo de todo el equipo de profesionales del Hospital Provincial, Luz Milagros Verón Boutet, la niña dada por muerta al nacer el 3 del abril del año pasado, falleció ayer, a las 13.05, en la unidad pediátrica de terapia intensiva de ese centro asistencial. La pequeña había sido derivada a Rosario junto a su madre con la idea de recolectar fondos para un tratamiento con células madre en China. “Era una paciente con varias secuelas neurológicas. La falla multiorgánica fue avanzando y un desenlace como éste, lamentablemente, podía darse”, indicó a La Capital el director del efector, Pietro Belletich.
La nena había quedado en asistencia mecánica respiratoria con medicación para compensarla hemodinámicamente.
Pero, según explicó el director del Provincial, la isquemia prolongada (falta de riego sanguíneo y disminución de oxígeno) hace que los órganos como cerebro, hígado, riñón y corazón comiencen a empeorar y funcionar mal.
Los intentos fueron en vano, pero el esfuerzo y la presencia del personal del centro médico tuvo una entrega total. Los profesionales y las enfermeras estuvieron pendientes en la unidad donde se permitió la internación conjunta de la beba con su mamá.
Belletich indicó que, tras el deceso de Luz Milagros, las autoridades del Provincial se pusieron a disponibilidad de los Verón Boutet para colaborar en canalizar el deseo final de la familia. Uno de los pedidos a los médicos fue preservar a sus padres y hermanitos, respetar su intimidad en un situación tan dolorosa. Hasta anoche no se había confirmado si las ceremonias fúnebres serían en Rosario o en Chaco.
Vía Facebook, Daniela Chiaramoni, tía de la niña, publicó en su perfil un crespón negro con la inscripción: “Un angelito más en el cielo, por siempre en nuestro corazón”.
Además, la mujer dejó algunos textos de agradecimiento a todo el apoyo recibido y a las cadenas de oración hechas por la chiquita. “No tengo fuerzas, pero las palabras de cada uno de ustedes nos hace sentir que el paso de Lucesita por esta vida, valió la pena, colmó de amor muchísimos corazones. Les pido que elevemos al cielo una oración”, expresó en uno de los párrafos.
Chiaramoni también solicitó: “Por favor, dejemos que su mamita pueda descansar. Lucesita tiene cuatro hermanitos más, es todo muy triste y pido por favor que podamos entender el momento que está pasando”.
La muerte de Luz Milagros causó un profundo dolor y una conmoción nacional que se reprodujo rápidamente a través de las redes sociales y canales de televisión. Con un año y tres meses de vida, toda su familia se había encaminado a juntar los 60 mil dólares necesarios para realizarle en China un tratamiento con células madre.
Al momento de conocerse el estado crítico de Luz Milagros, el gobierno chaqueño indicó que el viaje de Analía y su hija no habían contado con la autorización de los médicos que atienden a la nena porque su estado clínico nunca dejó de ser “delicado”.
“Fue una sorpresa para todos”, afirmó la secretaria social de la Gobernación de Chaco, Mariela Guerra, al diario El Norte de Resistencia.
El mismo periódico difundió ayer que la funcionaria había viajado a Santa Fe al momento de la internación de la nena.Pese al esfuerzo de todo el equipo de profesionales del Hospital Provincial, Luz Milagros Verón Boutet, la niña dada por muerta al nacer el 3 del abril del año pasado, falleció ayer, a las 13.05, en la unidad pediátrica de terapia intensiva de ese centro asistencial. La pequeña había sido derivada a Rosario junto a su madre con la idea de recolectar fondos para un tratamiento con células madre en China. “Era una paciente con varias secuelas neurológicas. La falla multiorgánica fue avanzando y un desenlace como éste, lamentablemente, podía darse”, indicó a La Capital el director del efector, Pietro Belletich.
El fin de semana pasado, Analía, la mamá de Luz Milagros, había llegado con la beba para visitar a parientes en la zona oeste de Rosario. Pero cerca de las 6 del sábado, el Servicio Integrado de Emergencia Sanitaria (Sies) tuvo que atender la niña.
Primero fue al Hospital de Niños Víctor J. Vilela , donde la reanimaron después de una crisis cardíaca, y luego la derivaron al Provincial, donde quedó alojada en la unidad pediátrica de terapia intensiva.
“Estuvieron todos trabajando e intentando revertir el cuadro, pero se hizo más comprometido a la mañana con una falla multiorgánica que fue avanzando hasta el desenlace de su muerte, a las 13.05”, indicó Belletich.
La nena había quedado en asistencia mecánica respiratoria con medicación para compensarla hemodinámicamente.
Pero, según explicó el director del Provincial, la isquemia prolongada (falta de riego sanguíneo y disminución de oxígeno) hace que los órganos como cerebro, hígado, riñón y corazón comiencen a empeorar y funcionar mal.
Los intentos fueron en vano, pero el esfuerzo y la presencia del personal del centro médico tuvo una entrega total. Los profesionales y las enfermeras estuvieron pendientes en la unidad donde se permitió la internación conjunta de la beba con su mamá.
Belletich indicó que, tras el deceso de Luz Milagros, las autoridades del Provincial se pusieron a disponibilidad de los Verón Boutet para colaborar en canalizar el deseo final de la familia. Uno de los pedidos a los médicos fue preservar a sus padres y hermanitos, respetar su intimidad en un situación tan dolorosa. Hasta anoche no se había confirmado si las ceremonias fúnebres serían en Rosario o en Chaco.
Vía Facebook, Daniela Chiaramoni, tía de la niña, publicó en su perfil un crespón negro con la inscripción: “Un angelito más en el cielo, por siempre en nuestro corazón”.
Además, la mujer dejó algunos textos de agradecimiento a todo el apoyo recibido y a las cadenas de oración hechas por la chiquita. “No tengo fuerzas, pero las palabras de cada uno de ustedes nos hace sentir que el paso de Lucesita por esta vida, valió la pena, colmó de amor muchísimos corazones. Les pido que elevemos al cielo una oración”, expresó en uno de los párrafos.
Chiaramoni también solicitó: “Por favor, dejemos que su mamita pueda descansar. Lucesita tiene cuatro hermanitos más, es todo muy triste y pido por favor que podamos entender el momento que está pasando”.
La muerte de Luz Milagros causó un profundo dolor y una conmoción nacional que se reprodujo rápidamente a través de las redes sociales y canales de televisión. Con un año y tres meses de vida, toda su familia se había encaminado a juntar los 60 mil dólares necesarios para realizarle en China un tratamiento con células madre.
Al momento de conocerse el estado crítico de Luz Milagros, el gobierno chaqueño indicó que el viaje de Analía y su hija no habían contado con la autorización de los médicos que atienden a la nena porque su estado clínico nunca dejó de ser “delicado”.
“Fue una sorpresa para todos”, afirmó la secretaria social de la Gobernación de Chaco, Mariela Guerra, al diario El Norte de Resistencia.
El mismo periódico difundió ayer que la funcionaria había viajado a Santa Fe al momento de la internación de la nena.