"El municipio no puede sembrar tanta incertidumbre y alarma al asegurar que el 60 por ciento del transporte se queda sin subsidios. Nada que ver. Sí está claro que la Nación no convalidará aumentos de la tarifa y, mucho menos, que le vayan a pedir más fondos. Hablé de esto con el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, y advirtió que la Semtur es absolutamente deficitaria". Con estas palabras, el concejal justicialista Osvaldo Miatello salió ayer al cruce de las conjeturas sobre una quita masiva de recursos que sostienen los costos actuales del sistema de colectivos de Rosario.
La Nación le metió más presión a la discusión sobre los costos del transporte rosarino, en medio de una fuerte polémica por el actual desfasaje del 18 por ciento entre tarifa y costo real del sistema, un aumento inminente a los choferes (estimado en un 20 por ciento) en paritarias y la eliminación de los subsidios a la oferta (que llegaban directamente a las empresas) para aplicar un mecanismo de compensación a los pasajeros.
Miatello mantuvo una extensa charla con Schiavi, cuyo contenido el concejal opositor tomó de base para negar una amenaza de quita masiva de los subsidios.
"No se puede generar tamaña incertidumbre respecto de la posible pérdida del 60 por ciento de los subsidios. Que cambie el sistema de distribución no implica una reducción, y todavía falta para que esas modificaciones lleguen a Rosario", sentenció el también vicepresidente del Ente del Transporte de Rosario (ETR).
El municipio estima que los cambios que aplicará la Nación en unos 330 mil traslados que se abonan en la ciudad aumentarán considerablemente su tarifa ya que, actualmente, la Casa Rosada subsidia el 70 por ciento del costo del boleto rosarino.
A eso hay que agregarle el desfasaje existente en un 18 por ciento entre el costo técnico del pasaje y la tarifa a 2,30 pesos por viaje. Un mix de variables que, con un nuevo aumento salarial a los choferes y una posible quita de subsidios, llevó a la intendenta Mónica Fein a proyectar el boleto por encima de los 4 pesos.
"Entiendo que Schiavi no va a convalidar aumentos de tarifa en las jurisdicciones para que después le vayan a reclamar más subsidios a la Nación, como tampoco avalar la ineficiencia en la gestión del transporte. El mismo criterio vale para las paritarias con los choferes con la idea de federalizar la discusión para que tengan en cuenta cada distrito y ver hasta dónde es posible aumentar", argumentó el edil.
En foco. Las críticas también recayeron sobre la Semtur, empresa municipal que administra gran parte del transporte rosarino desde 2002.
"La Semtur es absolutamente deficitaria, complica el equilibrio del sistema y eleva los costos. Incluso, en el presupuesto municipal 2012 está contemplado en el rubro aportes a terceros una partida de 30 millones de pesos para esa firma y otros 26 millones para La Mixta. El déficit es evidente", enfatizó Miatello.
Los balances de la empresa municipal reflejan que, para el periodo 2010, el déficit en sus cuentas fue de 12 millones de pesos, una tendencia negativa que la concesionaria en manos del Ejecutivo no pudo revertir desde 2002.
En el municipio admiten los números en rojo, pero los justifican en el salvataje que el propio Palacio de los Leones hizo con las concesionarias que abandonaron el sistema, jaqueadas por el desfasaje financiero (ver aparte).
En la actualidad, el transporte urbano de pasajeros se sostiene básicamente por los recursos estatales.
Cada colectivo de la ciudad recibe una partida del Sistema Integrado de Transporte Automotor (Sistau), que se obtiene por una alícuota al gasoil, un régimen de compensaciones a los aumentos salariales y un precio diferencial al combustible.
