El momento de Newell’s es soñado. Con la importantísima victoria ante Colón en el estadio sabalero trepó a la cima de la tabla de posiciones, tomó aire y se despegó en los promedios. Además, se acomodó entre los dos primeros en la pugna por acceder a la próxima edición de la Copa Libertadores. Así, el conjunto del Tata Martino no descuida ningún frente, se afirma como gran protagonista de la temporada y le suma razones válidas a sus anhelos. Un combo efervescente que brinda una proyección más que interesante.
La meta de esta pujante versión rojinegra es sumar. Cuanto más pueda, mejor. Todo el resto, son consecuencias saludables e ineludibles. Por allí pasan sus reales necesidades, pero desde su armado se atrevió a poner metas paralelas, por encima de su verdadero desafío.
Por eso se valoran en su real dimensión los 18 puntos que lo colocaron en la punta después de ocho fechas de disputa. Porque en un contexto de urgencias, se animó a levantar la cabeza y potenciar su fútbol con un plantel que ganó riqueza y variantes en el último mercado de pases.
La Lepra marcha invicto en el torneo y no es sorpresa. Todo lo contrario. Ganó cinco encuentros, igualó tres y todavía no conoce la derrota. Tiene 10 goles a favor y sólo 4 en contra. Es un líder serio, sólido y confiable. Incluso, cuando no consigue jugar como pretende (como ayer), igual se las arregla para lastimar al rival y sacar un rédito favorable en el resultado.
En tanto, en el escalafón de los promedios comienza a sacar una ventaja apreciable en un corto plazo. Es que con los tres puntos en Santa Fe, le sacó 8 a San Lorenzo y 14 a Independiente. Newell’s tiene 108 unidades y ya tiene por debajo a Quilmes, San Lorenzo, San Martín de San Juan, Unión, River e Independiente (los últimos tres se ubican en zona de descenso).
No sólo eso, con esta entonada marcha, los rojinegros se instalaron, con 50 puntos junto a Vélez, entre los dos mejores equipos argentinos en lo que va del año.
Eso le permite asentarse en posición de acceso a la próxima edición de la Copa Libertadores, un sueño siempre vigente en el imaginario futbolero leproso. Más atrás quedaron Boca, con 49, y Colón, con 41.