La economía argentina se desaceleró fuerte en el tercer trimestre del año al
crecer solo 6,5 por ciento con respecto a igual lapso del año pasado, la menor variación trimestral
interanual desde el primer trimestre de 2003, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y
Censos (Indec). Con este resultado, en nueve meses el Producto Bruto Interno (PBI) acumuló un
aumento de 7,5 por ciento.
Si se compara contra el segundo trimestre del año, el PBI subió apenas 1,3 por
ciento en la medición desestacionalizada.
Hasta ahora la economía venía creciendo trimestralmente a un ritmo mayor, que
será difícil repetir frente a la crisis financiera internacional que golpeó fuerte a partir de
octubre.
El recorrido anual. Así, en el primer trimestre del año el PBI subió 8,3 por
ciento interanual, y en el segundo trimestre aumentó 7,6 por ciento, en pleno impacto del conflicto
agropecuario sobre la actividad económica que se extendió hasta mediados de julio.
Si se mira el comportamiento de 2007, la evolución había sido la siguiente: 8
por ciento en el primer trimestre; 8,6 por ciento en el segundo; 8,8 por ciento en el tercero; y
9,1 por ciento en el cuarto trimestre.
En la misma sintonía, la inversión interna bruta fija creció en el tercer
trimestre del año 8,4 por ciento con respecto al mismo período de 2007, contra el 13,8 por ciento
del segundo trimestre, y el 20,3 por ciento interanual del primer trimestre.
Menor crecimiento. Por otra parte, la Comisión Económica para América latina y
el Caribe (Cepal) anunció ayer que prevé que el crecimiento económico de Argentina pase de un 6,8
por ciento en 2008 a sólo un 2,6 por ciento para el próximo año, por la crisis financiera
mundial.
Por otra parte, los técnicos de la Cepal indicaron que sobre el cierre de 2008
"han surgido dudas sobre la capacidad del sector público de hacer frente a las amortizaciones e
intereses de la deuda pública que vencen en 2009".