La coalición encabezada por Estados Unidos contra el grupo Estado Islámico (EI) adquirió mayor peso al concretarse ayer los primeros bombardeos franceses en Irak, y tras el acuerdo del Congreso estadounidense para ayudar a los rebeldes moderados en Siria. "Esta mañana, nuestros aviones Rafale efectuaron un primer ataque contra un depósito logístico" de los yihadistas del EI en el noreste de Irak, anunció la presidencia francesa. La situación bélica sin embargo, sigue siendo muy comprometida: los milicianos del EI se mantienen firmes en el frente al norte de Bagdad, e incluso realizaron incursiones con armas pesadas de efectos devastadores tras las líneas, así como ataques con coches bomba dentro de la capital iraquí.