Venezuela pospuso la juramentación del presidente Hugo Chávez para un nuevo mandato debido a la convalecencia del cáncer que padece, dijo el gobierno anoche, una nueva señal de que el delicado estado de salud podría alejar al líder socialista del poder.
Chávez, de 58 años, acostumbró a los venezolanos a su omnipresencia en los 14 años de gobierno. Sin embargo, desde que partió hace casi un mes a Cuba para someterse a una cuarta operación en la zona pélvica, no ha sido visto ni escuchado en público.
El vicepresidente Nicolás Maduro, que fue nombrado por Chávez como su sucesor político y ha tomado las riendas del país, envió ayer una carta a la Asamblea Nacional solicitando que el mandatario jure ante el Tribunal Supremo de Justicia en una fecha futura sin determinar.
La Constitución venezolana indica que el nuevo mandato empieza mañana y, ante la imposibilidad de que Chávez asuma en esa fecha, la oposición exige que se haga cumplir la norma que especifica que una junta médica debe decidir si el presidente está en condiciones de seguir al frente del país o si se debe llamar a nuevas elecciones.
"El presidente ha pedido informar que, de acuerdo con las recomendaciones del equipo médico que vela por el restablecimiento de su salud, el proceso de recuperación postquirúrgica deberá extenderse más allá del día 10 de enero", dice la misiva.
"Se invoca el artículo 231 de la Constitución a objeto de formalizar en fecha posterior la juramentación correspondiente ante el Tribunal Supremo de Justicia", agrega la comunicación leída por el presidente del legislativo, Diosdado Cabello.
El gobierno dice que, al ser Chávez un presidente reelecto, la toma de posesión es una mera formalidad, y que su líder "está consciente y está mandando".
Por mayoría. La petición para posponer la juramentación fue aprobada por la mayoría oficialista en la Asamblea, pese al repudio de la oposición, que reclamó en reiteradas ocasiones si el hecho de que fue Maduro y no Chávez el que envió la carta era una señal del débil estado de salud del presidente.
"Si la carta viniera firmada por Chávez, tendríamos más credibilidad", sostuvo el diputado opositor Miguel Angel Rodríguez.
Chávez reveló que padecía de cáncer en junio del 2011, pero la información sobre su enfermedad ha sido escueta y todavía se desconoce el tipo y fase de cáncer que sufre, así como los órganos afectados y qué tipo de intervención se le realizó en la isla gobernada por su aliado Raúl Castro.
La oposición busca que, al no asumir formalmente Chávez mañana, tome las riendas del poder Cabello, como jefe del legislativo, lo que podría abrir las puertas para una sucesión presidencial.
El gobierno ha desechado esos argumentos.
"El cuestionamiento legal no será sobre la legitimidad de Chávez, que la tiene en su elección. Sino en su reemplazo después del 10 de enero", opinó el analista político Luis Vicente León.
"Nadie ha planteado que Chávez no será el presidente después del 10 de enero. Pero no será presidente en ejercicio hasta que se juramente", aseguró.
El líder opositor Henrique Capriles aseguró que quien debería interpretar la ausencia o no de Chávez es el máximo órgano judicial, el Tribunal Supremo de Justicia.
El Tribunal y la Asamblea Nacional, ambos dominados por hombres y mujeres leales a Chávez, son los encargados de declarar la ausencia o incapacidad del presidente, tras la aprobación del informe de una junta médica.
El oficialismo convocó a la población a salir a las calles para mañana, cuando debería asumir Chávez, para apoyar al líder socialista, un festejo al que confirmaron su asistencia el presidente de Bolivia, Evo Morales, y el uruguayo José Mujica.
Capriles, gobernador del estado de Miranda, derrotado por Chávez en los comicios de octubre. pidió a los presidentes de América latina que no avalen la "intención del gobierno de demorar la asunción".