Independiente quedó cerca del nocaut. Sus chances de avanzar en la próxima ronda son muy escasas. Esa es su realidad tras el empate de anoche ante Liga Deportiva Universitaria por 1 a 1. Porque ahora necesita de una combinación de resultados casi utópica: un empate entre los ecuatorianos y Godoy Cruz, y golear a Peñarol en Montevideo.
La primera etapa fue dinámica. Hubo llegadas por los dos bandos. Eso habla de dos equipos que salieron a la cancha con un solo objetivo: quedarse con los tres puntos.
Fue de ida y vuelta. Parejo en líneas generales. Los dos generaron llegadas de peligro, pero ninguno las cristalizó.
La diferencia recién apareció a los 23 minutos. Tras una jugada, por los menos polémica, el conjunto dirigido por Antonio Mohamed se puso en ventaja en el marcador. Lionel Núñez estampó el 1 a 0 tras ejecutar un penal. El mismo fue sancionado correctamente. No obstante, en la jugada anterior hubo un claro offside que no fue cobrado. Por esa acción Independiente se fue al descanso con la ventaja en el bolsillo.
En el complemento las primeras chances de gol fue del local. Lo hizo con dos envíos desde fuera del área que terminaron en cabezazos desviados.
Después llegó una jugada desafortunada para el Rojo y el empate: un centro inofensivo fue desviado por Velázquez y dejó a Assman sin opciones.
A partir de ahí el partido estuvo para los dos. Hubo mucho peligro sobre los arcos. La más clara se produjo a los 83’ cuando Núñez estampó un remate desde afuera del área en el palo. l
