La lenta pero inexorable extinción de las tarjetas con banda magnética ha comenzado, al menos para ser utilizadas en los cajeros automáticos. Y el villano responsable de su desaparición se esconde en la tecnología biométrica bajo el nombre de huellas dactilares; que hicieron su aparición en la histórica Babilonia donde eran impresas en tablas de arcilla a modo de firmas y sellos en cuestiones comerciales. Pero cobraron importancia por dos condiciones increíbles: su constitución distinta en cada individuo, aun en mellizos y gemelos, y su calidad de inalterable a través de toda la existencia de una persona. En efecto, alguien puede cambiar artificialmente su color y extensión de cabello, el tono de sus ojos, usar o no barba y bigote, cambiar naturalmente su peso y otros detalles anatómicos, y hasta modificar su aspecto mediante cirugías, pero no podrá variar la configuración de sus huellas dactilares. Estas dos condiciones excepcionales las hicieron un instrumento valiosísimo de identificación personal, ampliamente utilizado por la policía de todo el mundo. La ciencia criminalística comenzó a tener un poderoso aliado como el ADN, pero no dejó de lado el auxilio de las huellas dactilares. En 1882 el policía francés Alphonse Bertillot creó un ingenioso aunque complicado método de identificación que llamó antropológico, y que consistía en tomar y archivar las medidas de diversas partes del cuerpo de una persona totalmente desarrollada. El sistema fue considerado infalible hasta que aparecieron dos sujetos con idénticas medidas. Por eso unos años después se produjo el momento "bisagra" en la historia de la identificación personal, cuando el científico inglés Francis Galton estudió las propiedades únicas de las huellas, que dejó explicadas en su libro "Huellas dactilares". El croata nacionalizado argentino Juan Vucetich, basándose en ese libro, elaboró en 1891 el método de identificación dactilar que fue adoptándose internacionalmente. Pero los relieves dactilares se emplean además en sistemas de seguridad, bancarios y de instituciones de beneficios sociales como la Ansés. Y ahora "van por más", porque una importante y conocida red de cajeros automáticos ha resuelto emplearlas en sus cajeros en lugar de las tarjetas de débito. Es decir que cuando ese nuevo modo de operar quede aprobado y establecido, ya no habrá riesgos de extravíos, robos, olvidos, equivocación en el ingreso del PIN o deterioro de la banda. La útil tarjeta magnética hizo su debut en el transporte público londinense a comienzos de la década del 60, pero fueron los bancos quienes vinculando tarjetas de débito a las cuentas que se abrían, y creando la tarjeta de crédito, causaron una avalancha mundial con ellas, que tuvieron activa participación en los cajeros automáticos, y en los posnet del transporte de pasajeros, supermercados, estaciones de combustibles, negocios en general y entidades de servicios. Por razones de seguridad, algunas entidades bancarias reemplazaron la franja magnética por un chip. De todas maneras, cualquiera sea el modelo, a las tarjetas se les ha "bajado el pulgar"; adecuada figura tratándose de huellas dactilares.
¡Felices 105 años, querida Ada!
Cuando hace un lustro celebramos los 100 años de doña Ada, jamás pensamos estar nuevamente de fiesta. Y ya ven, esta vieja rosarina el jueves 23 de marzo pasado cumplió 105. Sigue tan elegante y coqueta como siempre. Le gusta la ropa, leer La Capital todos los días, recita viejas poesías, mira la TV y juega a la escoba del 15 y al scrabel. No pasa un día en que no tome en sus comidas su copita de moscato, y nos sigue enseñando que el secreto de su vida sigue siendo "de todo un poco". Egresada del Normal Nº 2, ejerció como maestra en la escuela pública Almafuerte hasta jubilarse, allá lejos y hace tiempo. Tiene un estilo noble y distinguido, es tolerante y discreta. También pícara y con un gran sentido del humor. Vive rodeada del amor y cariño que en todo momento le brindan su hija Anemí, sus cinco nietos, cinco bisnietos y las señoras que la acompañan y asisten. ¿Qué más se puede decir? ¡Muy felices 105, Ada querida!
Mario Lisandro Armas
Sobre el paro docente
Pensé mucho antes de escribir, mucho. Soy jubilada docente, siempre denosté los paros, siempre, y más aún, jamás los hice. Al punto tal que una vez, una colega me dijo: "Vos no tenés disciplina gremial" y le contesté: "No, tengo, tuve y tendré vocación docente". Siempre serán los niños y sus familias los que padecen los paros y son ellos precisamente los que los necesitan en las aulas. Cuando el gobierno del doctor Arturo Frondizi implementó el Estatuto del Docente, los salarios de los maestros eran justos. Pero, claro, aparecieron los Martínez de Hoz, los Cavallo y otros, y echaron mano a la parte de sueldos: sin estos impresentables, hoy los docentes percibirían los salarios que se merecen, habida cuenta de la gran función que deberían cumplir. Además, he leído en algunas de las tantas "propagandas de la huelga: por el 82% para los jubilados docentes". Perdón, los jubilados docentes percibimos ese beneficio, en mi caso personal porque me excedí en años de servicios y en la edad, mi sueldo es del 100%. Ojalá esta, mi reflexión, sirva para que quienes están al frente de los gremios docentes, discutan, defiendan, expresen sus derechos con los alumnos en las aulas, y además que se debe ser docente en los mínimos y pequeños hechos de la vida diaria: los niños nos miran, el ejemplo es la mejor enseñanza. Quienes me conocen, saben que siempre opiné así y ojo, en tiempos en que los sueldos de nuestra provincia eran bien bajos, no como hoy: son los más altos del país, mal que nos pese. Prioricen a nuestros niños, reflexionen, y por favor, luchen con los alumnos en las aulas, así les demostrarán a quienes se regodean denostando la tarea docente que prima por sobre todo, el amor a los niños y a esa maravillosa tarea que los impulsó a elegir la fantástica acción de enseñar y aprender, que de eso se trata. ¡Ah! Y sería interesante que los que hoy, y desde hace bastante, dirigen los gremios, regresen a las aulas y les den a otros docentes la posibilidad de expresarse.
Consilia Varrenti
DNI 3.229.119
Lo que el socialismo se llevó
Hay que aguzar la memoria para hacer un balance de los tantísimos años de gobierno socialista. Lo primero que viene a mi memoria fueron los pobres sauces llorones de La Florida que tanto nos acogieron gratuitamente debajo de su sombra: durante la Intendencia de Binner se reemplazaron por sombrillas, pagas por supuesto. También La Florida fue privatizada, y la pileta Alem y el río, los tres sustitutos de vacaciones ahora son prohibitivos pare el que tiene menos recursos (el río se privatizó en el costo para cruzar, en ese sentido). Antes de Binner, el Anfiteatro Municipal era público y gratuito, fue construido para tal fin, pero también durante Binner fue empalizado y los espectáculos son pagos, la mayoría de ellos, por lo menos. Las peatonales fueron desnudadas de los bancos amigos de los jubilados y transeúntes que necesitan un alto en el camino, como un látigo fueron desplazados por los bares que ocupan el espacio público con lugares reservados para sus clientes. El otrora señorial bulevar Oroño parece un despojo, los bancos desaparecieron, como también el pasto. El parque Independencia pasó a ser una sombra lánguida: se hacharon despiadadamente eucaliptos sin número, el Rosedal desapareció. El reloj de flores que era una atracción turística, hoy es algo descolorido y sin lucimiento. Las bicisendas son imposibles de transitar y los bancos son inexistentes. La plaza López, envejecida y abandonada es otra muestra de una política que desmedra lo público y lo común. El zoológico era un hermoso edificio que podía haberse reciclado y cuidado de una mejor manera, sin embargo tuvo un final triste. Y también se fueron las costosísimas rejas que rodeaban el Paraná, debajo del Monumento a la Bandera, y los relojes de las peatonales ¿a dónde fueron a parar? Ni hablar de las antiguas mamparas del actual Ipos, desaparecieron. Los centenares de árboles en buen estado que siguen hachándose sin piedad por un contrato con Manteleletric que no se puede encontrar en ninguna parte, un contrato oculto. Y los cestos de basura también desaparecieron, como los bancos de las distingas plazas. El espacio verde Patio de la Madera fue concedido a McDonald's, ya no se puede disfrutar de la naturaleza por el olor a frito y aceites que abunda en el lugar. Y como si fuera poco, también le regalaron otra porción del Patio de la Madera a un privado que construyó un estacionamiento. Tampoco ya están las seis piletas para rehabilitación que hace años se cerraron dejando a los que sufren discapacidades y problemas físicos sin lugares dónde ir todo el año. Y podría seguir la lista ya que es interminable, el socialismo se llevó lo social y lo que atañe al bien común. ¿Un socialismo no social?
Myriam Koldorff
Que la oposición se haga cargo
Un exasperado Marcos Peña (jefe del Gabinete nacional) le enrostró a la oposición "háganse cargo de algo" durante la interpelación efectuada en el Congreso de la Nación. Ese justo pedido me conmovió y produjo dentro mío sentimientos encontrados: concordamos que es gravísima la realidad socioeconómica que estamos atravesando, ¿pero no recuerda el kirchnerismo, que mucho tiempo antes de diciembre de 2015 se había recorrido largo trecho descendente y que el barco quedó bajo la línea de flotación? Desde ese momento hasta hoy, lo único que hacen es trabar todo (en 2016 hubo 6.480 actividades piqueteras). Jamás ameritaron su total responsabilidad por ese estado de cosas y nunca demostraron apoyo, deseos de colaborar, pacificar las cosas. Solamente hacen oposición burda y barata contra esta administración que empeora la situación aún mas. ¿Olvidan el monumental vaciamiento que sus jefes naturales llevaron a cabo? ¿Ignoran que al huir del poder se cerraron al mundo, las reservas monetarias estaban agotadas, la pobreza era 29%, la desocupación fue del 10%, la inflación llegó al 30%, seguir subsidiando todas las tarifas denotaba un manotazo de ahogado, no podía sostenerse en el tiempo que trabajase un 50% mientras otros vivían miserablemente de planes oficiales? Recordemos que este equipo empezó muy mal su mandato y que demandará mucho tiempo revertir la cultura del facilismo. Mientras la oposición prosiga actuando sin hacerse cargo ni empujando hacia adelante, más tiempo nos tomará arrancar en serio.
DNI 6.012.531
