"Arvejas secas envasadas en conserva", dice la inscripción de una de las cientos de latas agolpadas dentro de un volquete ubicado frente a la sede central de Hogares de Protección al Menor (Hoprome, Castellanos 1264), la emblemática entidad que dirige el padre Tomás Santidrián. Desde allí se proveen alimentos hacia distintos albergues que habitan personas sin recursos, desamparadas y derivadas por la Justicia, pero ayer esto no sucedió, sino todo lo contrario: los envases fueron desechados y "no es la primera vez que tiran comida a mansalva", sostuvo una vecina indignada.
La descarga de las latas de la marca Inalpa estalló como una bomba entre el vecindario y se realizó cerca del mediodía a la vista de todos. "¡Cómo puede ser, con el hambre que hay no sólo dentro de los hogares que maneja Hoprome. Las latas estaban cerradas; me fijé en una y tenía fecha de vencimiento en noviembre de 2012", disparó una mujer. El comentario de otro de los habitantes del corazón de Echesortu contrastó con las explicaciones que, al parecer, surgieron desde el local de distribución. "Le pregunté a un hombre que trabaja ahí y me dijo que son donaciones vencidas, pero yo me fijé en las conservas y nada que ver, están vigentes".
La Capital repreguntó y la mujer no dudó: "Además, ¿por qué entonces hace poco arrojaron a la basura metros y metros de manta de polar que podría servir para hacer frazadas o, en todo caso, se desprendieron de algunos juguetes y ropa? Yo lo vi con mis propios ojos".
Otros testimonios abundaron en las denuncias. Según pudo saber este diario, hace unos seis meses fueron a parar a otro volquete cajas con polvo para hacer tortas, sopas en lata, puré de tomates y hasta aceite.
El contenedor que hasta anoche permanecía sobre Castellanos y Mendoza colmado de arvejas envasadas pertenece a la firma Volquetes Sur (contratada en general para trasladar escombros) desde donde afirmaron que Hoprome solicitó el servicio que terminará con el descarte de los elementos que había allí (basura, además de la comida) en un predio destinado a residuos.
Así y todo, en el barrio ayer había consternación y malestar. No sabían si se trataba de pura desidia, de la necesidad de buscar borrar una mala administración del lugar o lisa y llanamente de corrupción.
Hoprome es una asociación civil sin fines de lucro con personería jurídica. Está reconocida como entidad de bien público por la Municipalidad e inscripta en el registro nacional que agrupa este tipo de instituciones.
Fundada en 1976, recibe aportes de "padrinos" privados, de socios que pagan una cuota, de la provincia y la Municipalidad, aparte del Fondo Participativo de Inversión Social (Fopar), se indica en un Facebook oficial.
Irregularidades
Hoprome es una entidad bien conceptuada en la sociedad rosarina al igual que su director, Tomás Santidrián, pero sobrelleva varias denuncias. Una muy sonada se conoció a mediados de 2000. En esa oportunidad, una auditoría de la Dirección de Vivienda provincial detectó irregularidades en el manejo de dos millones de pesos.