La discusión por la prórroga del estacionamiento medido en manos de Tránsito Rosario (que expira el 19 de enero) ya comenzó. Ayer, los empresarios del centro avalaron una iniciativa del concejal Carlos Cossia que buscar reducir el horario del estacionamiento medido hasta las 19 los días de semana y promueve la eliminación del tarifado para los sábados. Las modificaciones se dan en el marco de una eventual prórroga por otros tres años que el Concejo Municipal deberá autorizar. Desde la firma concesionaria salieron a cuestionar la decisión y proponen cobrar el medido hasta las 20 de lunes a viernes.
La sede de la Asociación Empresaria de Rosario (AER) fue el puntapié para una acción conjunta entre el edil de Peronismo Solidario y las asociaciones de comerciantes del centro y microcentro.
"Buscamos estrategias que permitan favorecer tanto a los consumidores como a los vendedores de los locales del centro, para lograr de esta manera cierta competitividad con los comercios de los shoppings", argumentó Cossia en rueda de prensa. "Queremos que los usuarios puedan tener un mejor acceso al centro de la ciudad", agregó.
Estos retoques se proponen luego de siete años de concesión del estacionamiento medido estuvo a cargo de Tránsito Rosario. En la actualidad hay tres zonas en los que se divide el sistema en los que se puede pagar con parquímetros personales recargables, con monedas en las tickeadoras (algunos puestos tienen habilitadas las tarjeta Movi, que lee el saldo para comprar tiempo de parking) o través de una plataforma informática en la que se puede acceder con los celulares.
El concejal justicialista y vicepresidente del Ente de la Movilidad (EMR), Osvaldo Miatello, puso sus reparos a una iniciativa que aún no tuvo ingreso formal a Palacio Vasallo. "Me da la impresión que esta propuesta contempla sólo los intereses de los comerciantes del centro. Habría que analizarla en un marco de una política más integral y no de un sector", indicó al aclarar que es potestad exclusiva del Concejo decidir la prórroga, o bien esperar a que el Ejecutivo mande nuevos pliegos para licitar el sistema.
Por lo pronto, desde la AER, su titular Ricardo Diab, fundamentó el aval al proyecto de Cossia. "Toda iniciativa que contribuya a la comodidad de los rosarinos para llegar y visitar el área central representa la posibilidad de incremento de las ventas, por eso creemos que esta iniciativa es positiva. Cuando se liberó el estacionamiento en los días previos a las fiestas la actividad comercial creció notablemente, como sucedió el año pasado", señaló Diab, quien añadió que "pondría en igualdad de competencia con otros centros comerciales".
También dieron su apoyo los comerciantes, Juan Benzi, y titular de la Asociación Amigos de calle Córdoba, Nelson Graells, y los empleados mercantiles. "Cuando la gente llega al centro a buscar a sus familiares que salen de trabajar terminaban con una multa porque el horario no les permitía estacionar. A las 19 ya es suficiente como horario tope", indicó Graells.
Pago plus. En la habitual reunión de comisión de Servicios Públicos de ayer se acordó darle despacho a una iniciativa de los concejales Sebastián Chale y María Eugenia Schmuck que consiste en brindar al usuario la posibilidad de cancelar hasta una hora de estacionamiento medido, cuando la tarjeta Movi no cuente con saldo suficiente.
Según explicó en comisión la asesora del bloque en cuestión, cuando la tarjeta no cuenta con el importe de crédito suficiente, el sistema otorga una hora de tolerancia extra, que luego se descuenta al realizar la próxima carga al igual que ocurre con "el viaje plus", del transporte urbano de pasajeros.
Preocupan obras de la EPE
En el marco de las actividades de la AER también ayer hubo un encuentro con autoridades de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) donde se exigió el cumplimiento de los plazos en las obras del tendido subterráneo en la peatonal Córdoba. Ante los empresarios, los funcionarios de la EPE explicaron aseguraron que están trabajando sábado, domingo y feriados. La próxima semana estará finalizada la parte central, indicaron, dejando sólo un cantero angosto y permitiendo la circulación cómoda de los transeúntes. “Entendemos que se trataba de un obra necesaria y nos sentimos aliviados de saber que lo que resta completar no entorpecerá las ventas festivas”, cerró Diab.