España se podría salvar del rescate
Londres. — ¿Es posible que la zona euro haya encontrado un arma contra la crisis tan poderosa que jamás será necesario utilizarla? La mera "amenaza" de un programa de compra de bonos del Banco Central Europeo (BCE) ha rebajado las rentabilidades de España e Italia, reduciendo la necesidad de un rescate de esas naciones, cuarta y tercera economías de la Eurozona, respectivamente.
4 de noviembre 2012 · 01:00hs
Londres. — ¿Es posible que la zona euro haya encontrado un arma contra la crisis tan poderosa que jamás será necesario utilizarla? La mera "amenaza" de un programa de compra de bonos del Banco Central Europeo (BCE) ha rebajado las rentabilidades de España e Italia, reduciendo la necesidad de un rescate de esas naciones, cuarta y tercera economías de la Eurozona, respectivamente.
Este estado de limbo podría continuar. Para Italia, el rescate ahora parece improbable. El costo medio de su deuda es actualmente del 3,3 por ciento, por debajo de los niveles históricos. Salvo que exista un derrumbe político o un impasse después de las próximas elecciones, programadas para la primavera (boreal) de 2013, es difícil ver qué podría disparar un rescate.
España está más cerca del límite. Estaba previsto que el presidente del gobierno, Mariano Rajoy, solicitara el rescate después de las recientes elecciones regionales en Galicia y el País Vasco, y de afrontar unos vencimientos de 30.000 millones de euros. Pero los vencimientos pasaron y Madrid cuenta casi con suficiente financiación para acabar 2012. La actual rentabilidad a 10 años sigue siendo muy alta, a más del 5 por ciento. Pero Madrid amortigua el impacto emitiendo deuda a plazos más cortos.
Otro año difícil.La situación será más difícil el año próximo. El UBS pronostica que la emisión bruta de deuda española alcanzará 123.000 millones de euros —teniendo en cuenta el déficit, las regiones y la seguridad social—, frente a los 86.000 millones de este año. Una financiación más alta debe aumentar el costo de endeudamiento, pero podría ser insuficiente para disparar el rescate. España podría mantener a los inversores satisfechos durante meses insinuando que podría solicitar ayuda en algún momento.
Los inversores darían un paso atrás por temor a un sobresalto económico dramático, pero los mercados ya prevén un incumplimiento de los objetivos de déficit de este año y el próximo. El detonador podría ser político, como una escalada de la crisis griega o las propias tensiones de Madrid con Cataluña. Sin embargo, aunque España no necesite el rescate, podría encontrar ventajas si recurre al programa del BCE. Las compras de este bajarían los costos de financiación, tanto para bancos como empresas. Un obstáculo es la optimista previsión de déficit público, del 6,3 por ciento del PIB para 2012 y sólo 4,5 por ciento para el próximo. Las compras del BCE están condicionadas al cumplimiento de compromisos económicos.
Las rentabilidades españolas a 10 años han caído 2 por ciento desde comienzos de septiembre, por las esperanzas de que el BCE compre deuda como parte de un rescate de la zona euro. Eran del 5,6 por ciento el 31 de octubre. Las rentabilidades italianas a 10 años estaban alrededor del 4,9 por ciento, frente al 5,8 por ciento a comienzos de septiembre.