Oliver Stone trae de vuelta a Gordon Gekko en “Wall Street 2. El dinero
nunca duerme”, que se estrena mañana. Uno de los villanos más recordados de la gran pantalla
vuelve al ambiente que mejor conoce: las intrincados juegos de las altas finanzas. Pero además esta
vez quiere recobrar a su hija, con lo cual el director le dio un perfil más humano al personaje que
interpreta nuevamente Michael Douglas.
No se podía dejar pasar a un villano que adquiere una dimensión nueva después de
la crisis financiera que afectó al mundo y que se transformó en un terremoto que incluyó a los
grandes bancos y a especuladores de todo tipo.
El filme retoma la trama con Gordon Gekko saliendo de la cárcel, donde terminó
después de haber cumplido una condena por fraude financiero, lavado de dinero y crimen
organizado.
Gekko, aunque desterrado de Wall Street, parece un hombre nuevo. En tanto,
recibe el pedido de auxilio de su yerno Jake, interpretado por Shia LaBeouf. Jake lo ayudará a
facilitar un acercamiento con su hija y actual pareja, interpretada por Careyt Mulligan. A cambio
Gekko le dará la información que lo ayudará a encontrar las razones de la grave crisis que
atraviesa la empresa para la cual trabaja.
Para Stone, regresar al mundo que representó en 1987 con “Wall
Street” no solamente fue apropiado sino también una oportunidad para explorar algo nuevo.
“La crisis de 2008 se hizo de pronto muy interesante porque podías ver todas las fallas en el
sistema, y esta película es realmente una conjetura de lo que sucedió”, señaló Stone.
En ese sentido agregó: “No creo que me hubiera gustado trabajar en «Wall
Street 2» si no hubiera sido una historia totalmente original. Veintidós años más tarde hacen una
gran diferencia. Para mí el enfoque fue algo muy novedoso”, explicó el director.
Michael Douglas, en pleno tratamiento contra el cáncer en la vida real, está de
regreso en el papel que le dio un Oscar y cuyo lema, “La avaricia es buena”, y sus
movidas corporativas lo transformaron en en una estrella de las finanzas, hoy caída en
desgracia.
El intérprete dijo que se sigue asombrando por el impacto del personaje a pesar
de los años. “De todos los papeles que interpreté, Gekko es por el que más se me acerca la
gente”, comentó y añadió: “Siempre fue una sorpresa porque desde el principio lo
consideré un auténtico villano”.
El actor interpretó que esa vigencia se debe a un tema imperecedero como el
poder: “Wall Street es teatro. A la gente le encantan las historias sobre el poder, está
seducida por el poder. Por eso pienso que Gekko y el filme perduraron a lo largo de todos estos
años”.
El reparto, además de Douglas y LaBeouf, uno de los actores más ascendentes del
cine que encabezó “Transformers”, se completa con Josh Brolin (“Milk”),
Frank Langella (“Frost/Nixon”), Carey Mulligan (“Enseñanza de vida”) y
Susan Sarandon.