El umbral de realizaciones

Jonás Aguirre (22 años) es uno de los exponentes más destacados de esa generación de jugadores que se vio altamente perjudicada por la falta de competición durante tres años en la reserva. Esa falta de roce, rodaje y apuntalamiento produjo una dilatación de los tiempos naturales en la carrera de varios futbolistas canallas.

Las necesidades, las urgencias y los objetivos inmediatos conspiraron contra un desarrollo normal, en el que seguramente hubieran salido a escena mucho más temprano. La historia reciente auriazul le debe un gesto de reconciliación a estos pibes que prometen, pero que todavía deben atravesar el umbral de las realizaciones personales y entrar en el estado de las confirmaciones.

En este torneo pudieron cruzar esa inquietante brecha Walter Acuña y Tomás Berra. Dos valores también interesantes que ya están ganando minutos de consolidación en el escenario más exigente. Son patrimonio verdadero de la institución que están adquiriendo valor y la consideración de todos.

Jonás integra el grupo con jugadores como Pablo Becker (20), Federico Flores (21), Walter Montoya (20) y Franco Cervi (19), todos nombres que presagian un gran futuro y que empiezan a mostrarse en este presente de posibilidades que ofrece el Central de Russo.