La presidenta Cristina Fernández de Kirchner reveló ayer en Berisso que el superávit comercial
de mayo fue un 120% mayor que en el mismo mes del año pasado y destacó que el crecimiento se
produjo “en el marco de un mundo que se derrumba”.
“Hoy, a pesar de la crisis, de un mundo que se derrumba, el
superávit comercial de mayo fue un 120% más alto que en mayo del año pasado”, dijo. El saldo
comercial positivo pasó de 1.037 millones de dólares en 2008 a 2.281 millones de dólares.
Agregó que ese es el resultado de “poner ante la crisis
internacional más obras y más trabajo”.
Destacó que mientras las exportaciones de los grandes países caen en un
50% y 60%, en la Argentina “apenas se redujeron un 20%”.
Sin embargo, notó que el resultado de la política comercial del gobierno
nacional permitió mostrar en los primeros cinco meses de 2009 un superávit comercial de 8.100
millones de dólares, contra los 5.100 millones de dólares del mismo período de 2008.
“Este es el resultado del esfuerzo por mantener el nivel de
empleo”, dijo y recordó que la semana pasada participó de la inauguración de una planta
modelo en Almirante Brown, de un acto en la planta de General Motos en Alvear y recibió la visita
de industriales que radicarán plantas para fabricar calzado en el gran Buenos Aires.
Asimismo dijo que la renegociación de más de 1.500 convenios colectivos
de trabajo ayudaron a “recuperar el poder adquisitivo y generaron un mercado interno robusto
y sólido, ideal para enfrentar mejor a esta crisis”.
La presidenta se preguntó qué hubiera pasado si en esta crisis el
gobierno hubiese estado en manos de “algunos de los que hoy hablan y critican, y creen que el
Estado no debe intervenir y que el mercado todo lo resuelve”.