Mientras el mundo disfruta de los adelantos tecnológicos del nuevo siglo, una forma de grabación y edición musical considerada alguna vez vieja y obsoleta, el vinilo, vuelve con impulso renovados.
Mientras el mundo disfruta de los adelantos tecnológicos del nuevo siglo, una forma de grabación y edición musical considerada alguna vez vieja y obsoleta, el vinilo, vuelve con impulso renovados.
Los álbumes de vinilo, que empezaron a ser sustituidos por los CD a mitad de 1980, regresaron años ya que los amantes de la música, tanto jóvenes como mayores, añoraban el ruido a fritura que acompañaba a sus temas preferidos en su juventud.
Y ahora que las ventas han resurgido, los músicos que van desde Jack White y los Flaming Lips hasta las bandas recién surgidas graban su música pensando en el vinilo y lanzan discos con tapas al viejo estilo o pósters desplegables.
Si las bandas pueden mantener los costos bajos, serían inclusive capaces de ganar dinero extra en el negocio estancado de la música, donde las descargas baratas en internet están sustituyendo las ventas de CD, que alguna vez fueron lucrativas.
"Es difícil cuánto durará, pero incluso si tienes 16 años, tus padres seguramente tienen vinilos en algún lugar", dijo Wayne Coyne, el líder de Flaming Lips. "Probablemente estemos en el inicio de otra época, un mundo exótico en el que ésta será la forma de comprar música", agregó.
Los discos de vinilo nunca se extinguieron de las estanterías de las disquerías, por eso su resurgimiento en nuestros días alcanzó un hito en el camino que comenzó en el 2007.
El año pasado se vendieron 1,9 millones de discos de vinilo, casi el doble que en el 2007. La consultora de la industria musical Nielsen SoundScan proyecta que 2,8 millones de unidades serán compradas en el 2009.
Un amplio rango de bandas, desde Radiohead y los Beatles hasta Bob Dylan y Metallica, han estado suministrando álbumes de vinilo. Radiohead, por ejemplo, vendió 61.000 discos de vinilo en el 2008.
Las ventas de tocadiscos también se incrementaron, lo que sugiere que el vinilo tiene nuevos clientes y no sólo coleccionistas y puristas.
“El renacimiento de vinilo emana tanto de los músicos como de los aficionados, en busca de algo más tangible que sólo escuchar música en un archivo digital”, dijo Paul Simcoe, dueño de Criminal Records.
“Apoyaré a un artista hasta el final de los tiempos”, explicó con entusiasmo Simcoe. “Pero todavía tengo un problema inmenso al comprar algo que no puedo ver”, agregó.
Coyne, de los Flaming Lips, dijo que el vinilo aparece ante los sentidos de los aficionados de un modo en que no lo hacen las descargas digitales, al suministrar notas coloridas, pósters u otros artículos visuales que las descargas no tienen.
Por eso muchas bandas, sobre todo las nuevas o las que pertencen al circuito indie, quieren lanzar sus discos en vinilo, una situación que llena de esperanzas a la alicaída industria del disco.
Por Rodolfo Parody
Por Tomás Labrador / H.I.J.O.S. Rosario *