El oficialismo intentará aprobar el miércoles en el Senado el pliego de ascenso del jefe del Ejército, César Milani, y negocia contrarreloj para mantener alineado a su bloque y garantizar los votos de los aliados.

El oficialismo intentará aprobar el miércoles en el Senado el pliego de ascenso del jefe del Ejército, César Milani, y negocia contrarreloj para mantener alineado a su bloque y garantizar los votos de los aliados.
Las objeciones de algunos organismos de derechos humanos que señalan a Milani como sospechoso de haber participado en delitos de lesa humanidad durante la última dictadura convirtieron a esta en una de las votaciones más difíciles para el oficialismo.
La semana pasada, los nueve senadores oficialistas que integran la comisión de Acuerdos de la Cámara alta firmaron en soledad el dictamen para el pliego que propone el ascenso de general de división a teniente general, tras soportar que los opositores les enrostraran que estaban “entregando una bandera”.
Es por este mismo motivo que el pliego de Milani genera cierta resistencia entre los senadores del Frente para la Victoria y sus aliados, lo que tiñe de incertidumbre a la votación que tendrá lugar el miércoles.
La bancada del Frente para la Victoria que preside Miguel Angel Pichetto cuenta con un bloque de 34 senadores más seis aliados, que suelen ser cinco, debido a las reiteradas ausencias del riojano Carlos Menem.
Pichetto necesitará, primero, reunir el quórum de 37 senadores para poder sesionar, para lo que requiere asistencia perfecta de su bloque más tres aliados, y luego convencerlos de votar afirmativamente el ascenso.
Fuentes del bloque del Frente para la Victoria señalaron a Noticias Argentinas que la bancada oficialista se encuentra “bastante cohesionada” respecto de esta votación y que el desafío se encuentra en lograr que los aliados acompañen.
Entre esos aliados se encuentra el correntino José María Roldán, quien había exhibido algunas reservas con respecto a Milani cuando el pliego llegó al Senado en junio último, mientras que otros como la santafesina Roxana Latorre tienen antecedentes de definir su voto a último momento, como hizo cuando había que votar por Daniel Reposo para la Procuración General.
En tanto, fuentes parlamentarias indicaron que dentro del bloque oficialista se intensificaron los diálogos con el sanjuanino Ruperto Godoy y con la riojana Teresita Luna para evitar la fuga de sus votos cuando el pliego de Milani sea puesto a consideración del pleno senatorial.
Organismos como el Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels) que encabeza el periodista Horacio Verbitsky, objetaron el pliego debido a la denuncia del expreso político Ramón Olivera, que acusa a Milani de apremios ilegales.
El organismo también apuntó la sospecha de que el jefe del Ejército podría haber participado en la desaparición del conscripto Alberto Agapito Ledo, que era su ayudante en aquel entonces.
Ante estas objeciones, el argumento del oficialismo para avanzar con el pliego de Milani es que, al no estar procesado, rige la presunción de inocencia y ante un eventual procesamiento la presidenta Cristina Fernández lo removerá del cargo.