En medio de la polémica por la incorporación de 300 licencias de taxis y la falta de choferes para cubrir turnos, y el pedido de aumento por parte de los dueños de chapas, el secretario de Servicios Públicos municipal, Pablo Seghezzo, reconoció ayer que la tarifa "claramente está desfasada en comparación con otras ciudades, razón por la cual hay que asumir la brecha y habría que ajustar los valores". De este modo, la Intendencia le abrió las puertas a una nueva recomposición, que comenzará a ser analizada una vez que el Ente de la Movilidad remita ("en los próximos 15 días") al Concejo un informe con el estudio de costos.
El anuncio de un nuevo refuerzo para las actuales 3.600 licencias de taxis que realizó la intendenta Mónica Fein volvió a ubicar al tope de la agenda varios ajustes del servicio, que tanto usuarios como licenciatarios vienen reclamando.
Seghezzo dio más detalles de la iniciativa del Palacio de los Leones para cubrir la demanda a través de 300 nuevas chapas. "Hay dos opciones: incluir más o que las actuales licencias sumen horas de trabajo. El anuncio de Fein implica la intención de enviar antes de fin de año un mensaje al Palacio Vasallo solicitando ampliar la flota", explicó.
A la hora de analizar si la última incorporación de 500 licencias (en 2007 y con la obligación de prestar servicio las 24 horas) surtieron el efecto deseado, el funcionario evitó hablar de fracaso. E indicó que "están dando buen cumplimiento, aunque se detectó que no todas cubren la jornada laboral y que varias pidieron prórroga porque no consiguen choferes".
Entre los argumentos que explican esta falencia, Seghezzo indicó que "no contemplan imprevistos por accidentes, que los choferes tienen licencias y feriados".
Al respecto, Servicios Públicos redefinió un perfil para las chapas a agregar al sistema.
"La idea es contar con un titular de la licencia que se dedique al taxi, más un chofer, que podría ser un pariente (en el marco de una unidad de negocios familiar)", detalló Seghezzo.
Luego aludió a "una necesidad de aplicar cambios paulatinos ya que es un verdadero pecado que los rosarinos estén demandando un servicio y no aprovechar ese reclamo".
En relación al nuevo pedido de recomposición tarifaria por parte de las cámaras de titulares de licencias, Seghezzo admitió que "en Rosario claramente se nota que la tarifa está desfasada en comparación con otras ciudades".
"Habría que ajustar la tarifa y asumir que existe una brecha", enfatizó el secretario, para luego adelantar que el Palacio de los Leones enviará al Concejo "en los próximos 15 días" el nuevo estudio de costos.
Como dato comparativo, la Capital Federal tiene una bajada de bandera diurna de 8,20 pesos y una ficha cada 200 metros de 82 centavos. Frente a los 5,60 de bajada de bandera en Rosario, la brecha es del 43 por ciento.
En ese punto, el directorio del ente recibió una metodología de cálculo elaborada por la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), que deberá ser remitida al Palacio Vasallo con el fin de cumplir con la normativa que impone medir la evolución de los insumos en los coches de alquiler.
Al igual que los titulares, Seghezzo admitió que existen problemas de frecuencias. Y, si bien apeló a un estudio técnico, estimó que el faltante es palpable "los lunes, a primera hora de la mañana, cuando se registra un pico de demanda y por la tarde, durante la semana, entre las 17 y las 18.30".
En el resto de los horarios, el funcionario consideró que sólo "se tratan de problemas puntuales".