Los vínculos políticos de la Argentina con Rusia pasan por un buen momento y los lazos comerciales —en ese marco— transitan por un camino aceitado que aún tiene bastante tramo por recorrer. “Veo muchas oportunidades para aumentar el intercambio comercial entre ambos países”, sintetizó Sergey Derkach, representante comercial del país europeo que está posicionado como la octava economía del mundo y cuyo PBI creció en 2013 al 1,3%.
Ese potencial que describió el funcionario ruso encargado de los vínculos comerciales en Argentina —que estuvo en Rosario invitado por la Asociación Empresaria (AER)— debe consolidarse, a su criterio, diversificando la cooperación entre los países y aumentando el volumen del comercio con productos de alto valor agregado. “En Rusia no estamos satisfechos con la estructura de nuestro intercambio comercial, que está centrado en combustibles (que exporta Rusia a la Argentina) y agroalimentos (que van de Argentina a Rusia), ambos tenemos maquinaria, equipos y producción con agregado de valor como por ejemplo en la industria de las telecomunicaciones y la biotecnología”, indicó Derkach.
Los enfrentamientos de Rusia con los países europeos y Estados Unidos debido al conflicto en Ucrania empujan a un nuevo tipo de relación. “Rusia canceló importaciones de carne, queso y leche de Europa y busca abastecerse de compañías de otros países y Argentina figura entre los primeros lugares”, dijo el ejecutivo, quien destacó el potencial de Rosario y la región en ese perfil. “Rosario representa mucho en esta consolidación del comercio bilateral”, agregó.
Justamente la Secretaría de la Producción local y AER firmaron un acuerdo con la Cámara de Comercio de San Petersburgo para llevar adelante entre mayo y junio de 2015 una misión comercial a ese destino para afianzar el intercambio comercial. También Rusia confirmó su participación en la Feria Internacional de la Alimentación de Rosario (Fiar) 2015, según precisó el titular de AER, Ricardo Diab.
“El país hoy está en un momento coyuntural difícil para pensar el comercio exterior pero es clave analizar esto en el mediano y largo plazo”, indicó la titular de la cartera productiva local, Eleonora Scagliotti, durante el encuentro con el representante comercial de Rusia. “Por esa razón, entendemos que hay que apoyar a las empresas, fundamentalmente pymes, para incentivar y fortalecer los vínculos de Rosario con el exterior”, dijo y agregó como dato que actualmente el 85% de las pymes rosarinas nunca exportó.
En tanto, Gastón Raggio, secretario adjunto de comercio exterior de AER, explicó que en el actual contexto internacional, “las relaciones bilaterales primarán en el mundo de los negocios”, razón por la cual desde la entidad trabajan para promover este tipo de vínculos como ya ocurrió con Turquía.
Balanza comercial. Derkach explicó que equilibar la balanza comercial entre ambos países es clave en el intercambio, un volumen que ahora les cuesta definir porque cada país realiza una cuantificación diferente y que además está atravesado por la participación de terceros países que intervienen. “Muchos productos son adquiridos por Lituana, Letonia, Países Bajos o Suiza y luego llegan a Rusia”, ejemplificó. De todos modos, como dato indicó que el año pasado el comercio entre la Argentina y Rusia fue de u$s 2.500 millones.
Más allá de fortalecer los vínculos de comercio tradicional (centrados en los agroalimentos y el sector farmacéutico por parte de la Argentina y en combustibles y maquinaria vinculada por parte de Rusia), la intención de este acercamiento es transitar una nueva etapa orientada a la radicación de empresas en territorio ruso con know how argentino. “En fármacos y de maquinaria de siembra directa hay proyectos de producciones conjuntas en territorio ruso”, indicó el funcionario.A esto contribuiría un programa de garantías por más de 30 mil millones de dólares que tiene el gobierno ruso para empresas que van a invertir en proyectos industriales.
Unión aduanera. Por otra parte, Derkach destacó las ventajas de la Unión Económica Euroasiática, una unión aduanera que conformó Rusia con Bielorrusia y Kazajistán y a la que pretenden sumarse otros países como Armenia, que abre las oportunidades de negocios a un mercado de 170 millones de habitantes.
“No hay restricciones fitosanitarias ni aduaneras entre los tres países y la frontera externa la conforma la unión”, explicó el funcionario ruso. “Argentina en 2013 exportaba a Rusia 40 toneladas mensuales de carne aviar y ahora subió a 500 toneladas y hay planes de empezar a vender carne porcina”, agregó.
En el país las empresas rusas participan de la licitación de centrales hidroeléctricas y nucleares. “Si logramos ganar esas licitaciones compraríamos insumos y servicios en la Argentina”, dijo.