De repetir el desempeño de las primarias, el bloque de diputados del Frente para la Victoria lograría mantener un ajustado control en la Cámara baja los últimos dos años de mandato de la presidenta Cristina Kirchner.
De repetir el desempeño de las primarias, el bloque de diputados del Frente para la Victoria lograría mantener un ajustado control en la Cámara baja los últimos dos años de mandato de la presidenta Cristina Kirchner.
No obstante, la bancada kirchnerista tiene en claro que para no debilitarse deberá mejorar hoy sus resultados para estar a cubierto de eventuales fugas y saltos de bando.
La clave está en provincia de Buenos Aires, donde el oficialismo perdió terreno a manos del Frente Renovador de Sergio Massa. En este distrito se ponen en juego 35 bancas y, si se repiten los números de la interna, el tigrense se llevaría 14 y solo 12 quedarían en el kirchnerismo.
El objetivo de la campaña fue descontar la diferencia entre Massa y Martín Insaurralde, para sumar algún escaño más, que también le sirva como contención futura a posibles fugas por goteo, algo que ya ocurrió después de agosto.
Al kirchnerismo también le preocupa la fuerza que la oposición mostró en las principales provincias, ya que los distintos candidatos del arco anti-K se impusieron en Capital Federal, Mendoza, Córdoba y Santa Fe, los distritos donde se juega la mayor cantidad de lugares.
En todo el país, el bloque del gobierno arriesga menos bancas que la oposición, pero si se repiten los resultados de agosto quedará muy exigido para ganar las votaciones, ya que luego de las primarias perdió algunos respaldos propios. Esos alejamientos se inclinaron hacia el Frente Renovador, espacio que de ganar nuevamente las elecciones quedaría en buena posición para seguir sumando adeptos a costas del bloque K.
Entre propios y aliados, el FpV cuenta con 131 legisladores (dos más de los 129 que requiere el quórum) y hoy arriesga 47 bancas. De mantener el resultado de las internas, la Casa Rosada empataría o superaría por poco el número de bancas que pone en juego, quedando al límite del control legislativo.
La oposición, en tanto, tiene una tarea más difícil, ya que de los 126 escaños que actualmente posee, debe renovar 78.
De los 127 diputados que se elegirán hoy, 35 son del FpV, 25 de la UCR, 9 del Frente Peronista, 8 del PRO, 8 del Frente Renovador, 6 de la Coalición Cívica, 3 del Frente Cívico por Córdoba, 3 de Compromiso Federal, 3 de Proyecto Sur, 3 de Nuevo Encuentro, 3 del Frente Cívico por Santiago, 2 del Movimiento Popular Neuquino, 2 de Córdoba Federal, 2 de Unidad Popular, 2 del GEN, 2 del PJ La Pampa y 11 de monobloques.
Por Alvaro Torriglia y Sandra Cicaré