El costo de vida experimentó una suba del 1,1 por ciento durante el mes de enero, la cifra mensual más alta de los últimos tres años, impulsado más que nada por los aumentos registrados en los boletos de trenes y colectivos, y por las vacaciones de verano, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Como casi todos los meses, la inflación oficial fue menos de la mitad de la relevada por las consultoras privadas, que se ubicó en el 2,58 por ciento según sondeos que los legisladores de la oposición difundieron en el Congreso a principios de semana.
Aún así, por primera vez desde febrero de 2010 la suba de precios registrada por el organismo oficial superó el 1 por ciento mensual.
Para los cálculos del Indec, durante los últimos doce meses la inflación fue del 11,1 por ciento, contra el 26,3 por ciento relevado por las estadísticas elaboradas por las entidades privadas.
Respecto de la tasa anualizada, la acumulada a enero de este año es la más alta desde julio del 2010, cuando se ubicaba en el 11,2 por ciento.
Las mediciones de febrero y marzo seguramente mostrarán mayores diferencias con los sondeos privados, ya que en esos meses estará en vigencia el acuerdo de precios que el gobierno suscribió con supermercados, hipermercados, cadenas de electrodomésticos y útiles escolares.
En ese punto existe una fuerte polémica sobre la eficacia y el alcance de un acuerdo que no ha sido publicado de manera formal desde ninguna cartera del gobierno.
Para muchos consultores, el "día 61" vendrá acompañado de fuertes alzas en varios productos esenciales.
Otros, en cambio, aseguran que habrá faltantes de mercadería en los supermercados, que optarán por stockear ciertos productos hasta que puedan aplicar los aumentos.
A su vez, en su informe del día de ayer el organismo estatal informó que el costo de la construcción subió un 0,4 por ciento durante enero, tras lo cual acumuló en un año un alza del 19,4 por ciento.
Por su lado, los precios mayoristas aumentaron un 1 por ciento, sumando un total del 13,2 por ciento en los últimos doce meses.
Para la medición oficial, el rubro que más influyó en la inflación de enero de este año fue transporte —por la suba de boletos de trenes y colectivos—, con un alza del 6,1 por ciento, mientras que, como contrapartida, el sector de la indumentaria protagonizó un retroceso en sus precios de hasta un 4 por ciento.
El rubro esparcimiento —un indicador estacional que siempre se dispara en época de vacaciones—, experimentó previsiblemente un incremento del 3,5 por ciento.
Esto fue seguido por atención médica y gastos para la salud, con un 1 por ciento; equipamiento y mantenimiento del hogar, con el 0,6 por ciento; educación, con subas del 0,5 por ciento; vivienda y servicios básicos, con incrementos del 0,2 por ciento, y alimentos y bebidas, que auemntaron hasta un 0,3 por ciento.
Entre las subas más importantes se ubicaron los boletos de los colectivos urbanos de pasajeros, con aumentos de hasta un 22,1 por ciento; los pasajes de los trenes, con un 19,7 por ciento; y los tomates perita, con un alza del 15,3 por ciento.
Por el contrario, los productos que más bajaron de precio durante el primer mes del año fueron el zapallo con una importante baja del 28,2 por ciento; el ají, que perdió el 22 por ciento de su valor; y la batata, con una merma del 9,4 por ciento.
En enero, además, el Indec detectó un descenso del 2 por ciento en los precios de las frutas y una caída del 1,1 por ciento en las verduras, y también relevó una baja del 4,6 por ciento en el sector de la indumentaria, y del 3,3 por ciento en lo que refiere a los calzados.
Entre las subas detectadas en alimentos y bebidas se destacaron las correspondientes a los aceites (0,9 por ciento), lácteos y huevos (0,7 por ciento) e infusiones (0,5 por ciento).
Para el organismo, el rubro alquiler de viviendas no exhibió cambios respecto de diciembre.