La máquina de escribir que el cineasta estadounidense Francis Ford Coppola dejó en Tokio cuando regresaba del rodaje de "Apocalipsis Now", y donde había escrito el guión del filme, volvió a sus manos 35 años después.
La máquina de escribir que el cineasta estadounidense Francis Ford Coppola dejó en Tokio cuando regresaba del rodaje de "Apocalipsis Now", y donde había escrito el guión del filme, volvió a sus manos 35 años después.
En plena rueda de prensa ofrecida con motivo de la concesión del prestigioso Praemium Imperiale, apareció la dueña de un hostal de Tokio, en el que Coppola se hospedó tras culminar en Filipinas la filmación de la película, y le hizo entrega del aparato, dijo la prensa española.
El director de la saga de "El Padrino" explicó que empleó esa máquina mientras intentaba dar sentido a todo lo que había acumulado en un rodaje en el que tuvo que enfrentar la bancarrota, al ataque cardíaco de su protagonista Martin Sheen y a tifones que destrozaron los decorados.
"Estaba deprimido y metido en un desastre financiero, así que vine a Japón a pensar y escribir", afirmó Coppola. Buena parte de la rueda de prensa giró precisamente en torno a aquella etapa de su carrera en los años 70, cuando rodó "Apocalipsis Now", que tanto contrasta con su actual fase creativa.
"Ahora se piensa que fue una época impresionante en mi carrera, pero entonces todas mis películas se recibieron con escepticismo. En realidad, no me di cuenta de que había sobrevivido a ese período hasta 15 o 20 años después", recordó.
"Muchos me preguntan: «¿Por qué no son tus películas tan buenas como entonces?»", dijo Coppola. Para ser sincero, haga lo que haga ahora, no sabré hasta dentro de 15 o 20 años cómo han sido recibidas realmente".
Coppola explicó que al cumplir 60 años decidió que no quería competir con su propio trabajo anterior y volvió a convertirse en un "estudiante" para rodar tres películas "pequeñas y raras": "Juventud sin juventud", "Tetro", rodada en la Argentina, y "Twixt".
Por Carina Bazzoni
Por Lucas Vitantonio