El ministro del Interior, Florencio Randazzo, aseguró que el gobierno hará “todas las
gestiones para defender los intereses argentinos” frente a la estatizaciones de empresas
nacionales ordenadas por el presidente venezolano, Hugo Chávez.
El funcionario respondió así positivamente a las presiones de las
corporaciones empresarias para que asuma la defensa del grupo ítalo-argentino Techint luego de la
decisión del gobierno venezolano de nacionalizar tres compañías siderúrgicas de ese país, en las
que tiene participación la familia Rocca.
Como parte de su plan de expropiaciones vinculadas al programa de
construcción del socialismo en Venezuela, Chávez anunció el viernes pasado la nacionalización de
las empresas Tavsa (Tubos de Aceros de Venezuela), Matesi (Materiales Siderúrgicos de Venezuela) y
Comsigua (Complejo Siderúrgico de Guyana). En las dos primeras, Techint tiene una participación
accionaria mayoritaria mientras que en la tercera es accionista minoritario.
El año pasado, el gobierno de Chávez inició el proceso de
nacionalización de Sidor, la principal acería de ese país, que también contaba a Techint como
principal accionista. La operación se terminó de cerrar este año, cuando con el apoyo del Ejecutivo
argentino, la firma se alzó con una indemnización de 1.970 millones de dólares.