Un severo ajuste de precios en los mercados globales tumbó ayer las acciones líderes en la Bolsa de Comercio porteña, donde el índice Merval derrapó 6 por ciento y los bonos soberanos sufrieron fuertes pérdidas, en especial los nominados en pesos.
Un severo ajuste de precios en los mercados globales tumbó ayer las acciones líderes en la Bolsa de Comercio porteña, donde el índice Merval derrapó 6 por ciento y los bonos soberanos sufrieron fuertes pérdidas, en especial los nominados en pesos.
Ochenta y ocho papeles cerraron con pérdidas en la plaza bursátil porteña, contra sólo cuatro alzas, en una rueda en que se triplicó el volumen promedio negociado en acciones, hasta unos 125 millones de pesos.
El Merval, que registra el comportamiento de los 19 papeles líderes, perdió sobre el inicio de la jornada bursátil el soporte de los 3.300 puntos, a media rueda el de los 3.200 y sobre el cierre pudo mantenerse a duras penas sobre las 3.100 unidades.
El índice Merval llegó a su nivel más bajo desde el 1º de noviembre de 2010, para cerrar en 3.109,86 puntos en la Bolsa de Comercio porteña, donde acumulaba una caída de 6,4 por ciento en el mes y de 11,74 por ciento en lo que va del año.
El papel de Tenaris, el cuarto con mayor ponderación en el Merval, fue el que más perdió, 9,93 por ciento, debido a la fuerte caída en el precio del petróleo y a la presentación de su balance trimestral con resultados peores a los esperados por los inversores.
Los restantes cuatro papeles con más peso en el indicador líder también se despeñaron: Grupo Financiero Galicia perdió 6,15 por ciento, Petrobras Brasil cedió 7,3 por ciento, Telecom retrocedió 4,63 por ciento y Pampa Holding cayó 7,7 por ciento.
En el mercado de bonos, el PAR en pesos cayó 4,8 por ciento y en dólares con ley argentina mermó 2,24 por ciento, el cupón PBI en pesos retrocedió 2,1 por ciento y dólares con ley doméstica perdió 2,2 por ciento, mientras el riesgo país saltó hasta los 650 puntos básicos.
Los activos locales operaron en línea con los resultados de los mercados externos, donde los inversores desarmaron sus posiciones ante el temor de una nueva recesión mundial, a pesar del positivo dato del empleo estadounidense.
En Wall Street, el promedio industrial Dow Jones derrapó 4,3 por ciento. En la región, la Bolsa de San Pablo perdió 5,7 por ciento.
Por Claudio González