El “diario de Ana Frank” americano

Ambientada en las plantaciones del sur de Luisiana y basada en las memorias de 1853 de un hombre negro libre que fue secuestrado y vendido como esclavo, “12 años de esclavitud”, que se estrena el jueves en Argentina, es una de las películas con mayor cantidad de nominaciones al Oscar y que obtuvo algunos de los galardones más importantes de cada al Oscar.

   “12 años de esclavitud” está basada en la historia real de la lucha de un hombre por su supervivencia. En los Estados Unidos previos a la Guerra Civil, Salomon Northup (Chiwetel Ejiofor), un hombre negro y libre del estado de Nueva York, es secuestrado y vendido como esclavo. Enfrentado a la crueldad de un propietario de esclavos interpretado por Michael Fassbender, Solomon lucha no sólo por sobrevivir, sino para conservar su dignidad. En el duodécimo año de su odisea, el encuentro fortuito con un abolicionista canadiense, a cargo de Brad Pitt, también uno de los productores del filme, cambiará su vida para siempre.

   El filme, que se estrena el jueves en Argentina, llega precedido por importantes premios y nominaciones, en la recta final del premio de la Academia que se entrega el 2 de marzo. En la lista se cuentan el Globo de Oro a mejor drama, diez nominaciones al Bafta (el mayor premio del cine inglés), y los recibidos por parte del Sindicato de Actores, las asociaciones de críticos de Nueva York, Chicago y Florida, además de siete nominaciones a los Independent Spirit Awards.

   Con sus nueve nominaciones “12 años de esclavitud” forma parte del trío de favoritas para arrasar con los premios, completado por “Gravedad” y “Escándalo americano”, con diez nominaciones cada una.
  El responsable de este fenómeno que acaparó la atención mundial es el inglés Steve McQueen, quien en 2012 se dio a conocer al gran público con su intimista “Shame, sin reservas”, también protagonizada por Fassbender, quien lo acompaña desde el inicio cuando rodó su primer largometraje, “Hunger”, en 2008.

   Ahora el director tomó esta historia de un esclavo real que fue éxito de ventas y que rastrilla la memoria de la esclavitud exactamente 160 años después de la publicación del libro, y que transcurre sólo ocho años antes del inicio de la Guerra Civil.

Historia universal. Aunque es una historia ambientada en Estados Unidos, se habla mucho de la película, pero también de su director británico. “Es extraño que fuera un británico, Steve McQueen, el que se preguntara: ¿Por qué no hay más películas sobre la esclavitud americana? Y tiene razón”, dijo Brad Pitt. La revista Variety fue elocuente: “Es una desgracia que hiciera falta un director británico que mirara a la cara este asunto”.

   McQueen resta importancia al papel que pueda jugar su nacionalidad, como lo hace el actor que interpreta a Solomon Northup, Chiwetel Ejiofor, un británico de origen nigeriano. Ambos tienen casos de esclavitud en su familia y creen en la naturaleza global de la historia.

   “Soy parte de la diáspora de la esclavitud”, afirmó el director. Nacido en Londres, de antepasados africanos, su historia es muy diferente a la de un afroamericano, pero también cuenta con la experiencia de la inmigración a Europa, lo que le hizo estar interesado por una historia real que primero creció en su mente.

   “Simplemente es una de esas historia que sentía la necesidad de contar”, dijo McQueen. “Mis ancestros eran esclavos, claro. Procedo de las Indias Occidentales. Viajé por toda América y América del Sur y tuve la idea de América del Norte y la idea de su hombre libre”.

   McQueen, que se ganó a la crítica con sus dos primeros drama “Hunger” y “Shame, sin reservas”, también siente parentesco con Estados Unidos, debido a la diáspora de su familia y los vínculos entre las Indias Occidentales y la cultura negra americana.

   “Necesitaba hacerlo. De alguna manera, era una urgencia, una necesidad, nunca había visto un filme como este en la pantalla. Necesitaba ver esas imágenes en la pantalla, ver este momento de la historia”, explicó el realizador.

   McQueen comenzó a pensar en hacer una película sobre la esclavitud y tenía la idea de construirla sobre un hombre libre que es secuestrado y llevado a la esclavitud. “Eso era todo lo que tenía, y paré. Pero entonces hablé con mi mujer y me dijo que por qué no hacía una investigación sobre esos hechos, sobre algún hombre que hubiera sido forzado a ser esclavo”.

   Y al ahondar en el tema se encontró con el libro “12 años de esclavitud”, que contaba la historia real de Solomon Northup, un hombre libre transformado en esclavo. “Fue muy extraño, porque era exactamente como yo lo había imaginado. Era idéntico a mi idea, fue como un imán, una locura”, explicó McQueen. “Este libro es el equivalente al «Diario de Anna Frank», pero para América”, destacó.

   Ejiofor, en el papel más importante de su carrera, cree que la esclavitud es algo que ha definido la experiencia de la mitad del planeta. “Soy igbo, mi familia es igbo, del este de Nigeria. Cientos de miles de igbos fueron llevados desde el sureste de Nigeria a Luisiana”, dijo Ejiofor.

   Ejiofor, como Northup, empieza la película como un hombre libre, un músico que tenía una buena vida con su mujer y sus dos hijos en el estado de Nueva York. Pero entonces cae presa de dos hombres que lo drogan para venderlo como esclavo y empieza su descenso en un mundo anterior a la Guerra Civil que nunca imaginó que podría ser tan cruel.

Identificación. “La razón por la que se me ocurrió la idea de un hombre libre es que puedes identificarte con él”, dijo McQueen. “Cuando lo capturan y se convierte en esclavo, vas con él en ese viaje”.

   McQueen fue dando vueltas en círculos para desarrollar la historia cuando su mujer historiadora encontró la autobiografía de Northup. Al principio de la película, Northrup intenta convencer a todo el mundo de que es un hombre libre, pero pronto aprende que mostrar su inteligencia lo convierte en una amenaza para los comerciantes de esclavos y compradores. Trabaja duro, cuida de los demás y sobre todo mantiene la cabeza baja.

   Pero entonces se encuentra en propiedad de Edwin Epps, un hombre complejo y brutal interpretado por el actor germanoirlandés Michael Fassbender que bebe mucho y está profundamente enamorado de la esclava Patsey, encarnada por Lupita Nyong’o.

   Solomon intenta protegerla de Epps, pero la desesperación de su dueño le lleva a castigos físicos y mentales extremos, entre el denso calor y la suciedad, a unos pasos de su casa en la majestuosa plantación.

   Sobre la avalancha de premios y candidaturas, expresó pragmático: “Hice mi película. Como director quiero hacer mis películas y nunca me planteo la posibilidad de ganar premios; solo contar historias y lo hago lo mejor que puedo”.