El diputado nacional Carlos Kunkel cuestionó ayer la injerencia de la jueza federal Sandra Arroyo Salgado en la causa que investiga la muerte de su ex marido, el fiscal Alberto Nisman, y advirtió que “hay un desesperado intento por cobrar los seguros”.
El legislador consideró que era “imposible investigar la causa de un deceso si la jueza Arroyo Salgado está impidiendo que se haga peritaje sobre llamadas telefónicas y sobre las comunicaciones por vía informática”.
Kunkel también señaló que “con respecto a la vida privada” del fiscal que murió de un balazo en la cabeza el 18 de enero “cómo se sabe si la muerte fue por una causa o por otra si no se sabe cuál era el entorno de las personas que lo frecuentaban y la relación que tenían”.
En ese marco, el diputado kirchnerista observó que hay “un desesperado intento por cobrar los seguros y cuando alguien se suicida no se paga el seguro”.
A las críticas de Kunkel se sumó también Diego Lagomarsino, el técnico informático dueño del arma que mató a Nisman, quien consideró que “tal vez la jueza Arroyo Salgado está ocultando algo”, pero aclaró que de su parte no está en guerra con la magistrada. “Es más, no tendría problema en sentarme y hablar. Eso sí, con un escribano en el medio para que no digan que pasó algo que no pasó. No sé qué estoy ocultando. Tal vez ella está ocultando algo”, reiteró (ver aparte).
Mientras tanto, la fiscal de instrucción Viviana Fein deberá definir hoy sobre el pedido de anulación de la junta médica para revisar la autopsia al cadáver de Nisman que presentó Arroyo Salgado, querellante en el caso, tras el duro cruce mediático que ambas protagonizaron el fin de semana por la instrucción de la causa.
Más allá de las declaraciones cruzadas a través de la prensa, hoy en su oficina la fiscal Fein definirá si hace lugar al pedido de Arroyo Salgado para anular la junta médica prevista para esclarecer puntos de disidencia sobre la muerte de Nisman.
El planteo fue presentado el viernes por la jueza que objetó la forma de convocatoria al peritaje y a los especialistas que están citados a integrarla y reclamó que sea supervisada por la jueza Fabiana Palmaghini.
En declaraciones publicadas ayer por el diario La Nación, Arroyo Salgado volvió a cuestionar a la fiscal y explicó que pidió la anulación de la junta médica porque consideró que “faltaban profesionales de otras disciplinas y no estaba claro sobre qué materiales iban a trabajar”, pero enfatizó que “de ningún modo” su “intención es que la causa se dilate”.
Consultada sobre si desconfía de la investigación, dijo “sí” y expresó que “el hecho determinante” para recusar a Fein fue la designación del perito Enrique Prueger. “Nosotros recusamos a Prueger porque había dicho que creía que se trataba de un suicidio. La fiscal lo eligió ex profeso porque pregonaba esta hipótesis”, enfatizó Arroyo Salgado.