Distintas situaciones de robo y violencia que vivieron unos 17 taxistas entre el jueves pasado y antenoche fueron el lado oscuro de los festejos por el día del Amigo que se conoció ayer. De los asaltos, denunció el secretario general del sindicato que agrupa a los choferes, Horacio Boix, más de la mitad la protagonizaron delincuentes armados que iban abordo de motos y lograron robar tanto a los conductores de taxis como a sus pasajeros. "Pasó de todo: algún chofer fue golpeado, a una compañera le clavaron un destornillador, hubo asaltos, gente alcoholizada y agresiones permanentes", relató, para tildar la situación de "totalmente injusta" ya que, si los taxistas no cumplen con sus turnos, el municipio los "amenaza con sanciones, pero sin que nadie garantice una mínima seguridad".
Según contó el dirigente, del jueves en adelante en las calle de Rosario se vivieron días "bastante descontrolados", como en "cualquier festejo tan extendido".
Pero a diferencia de otras épocas, dijo, cuando los taxistas eran básicamente asaltados por ladrones que se hacían pasar por pasajeros, ahora la modalidad más frecuente es la que Boix atribuye a los "motochorros": delincuentes que ponen sus motocicletas a la par de los taxis y amenazan con armas al conductor por la ventanilla para que detenga su marcha o, sin parar, entregue recaudación y pertenencias.
También hubo golpes por un pequeño incidente de tránsito en Pichincha que tuvo como víctima a un taxista y como agresores a dos hombres jóvenes y una situación más grave que se registró en barrio Acíndar y que terminó con tres detenidos.
Según el parte policial, el episodio ocurrió cuando el conductor de un taxi Chevrolet Corsa acudió a ayudar a un compañero que necesitaba auxilio mecánico y al llegar fue sorprendido por un grupo de jóvenes, uno de ellos armado, que le sustrajeron la billetera.
Tras alertar al 911, un móvil del Comando Radioeléctrico que patrullaba la zona logró detener a tres personas: un chico de 16 años, otro de 19 y una mujer de 21, que según la policía estaban en poder del arma de fuego utilizada contra el taxista, quien además los reconoció como sus asaltantes. Así fue como los tres quedaron detenidos en comisaría 18ª, a disposición de la Justicia.
Para Boix, no hubo una zona más "caliente" que otra en materia de inseguridad para los taxis. "En esa clase de eventos (por el Día del Amigo), como hay tanto movimiento, los incidentes se pueden dar en cualquier punto de la ciudad".
Hasta ayer el gremio no había sido convocado por la autoridades municipales ni provinciales para monitorear la problemática. Y como hoy y mañana sus directivos participarán de un congreso sindical a nivel nacional, la expectativa era que los citaran después de mitad de semana.
Aun así, Boix no cifró demasiadas expectativas porque "las reuniones con (la cartera de) Seguridad y la cúpula policial son permanentes", sin que hasta ahora haya existido cambios sustanciales.
Con ese diagnóstico coincidió el titular de la comisión de Seguridad del Concejo, Diego Giuliano, quien recordó que se viene reuniendo con referentes de distintos sectores de la actividad, como de la agrupación Rolando Rivas y la Cámara de Titulares de Taxis (Catiltar).
"Estamos buscando alternativas a esta situación de neutralidad en la que parece haber quedado todo", dijo el edil, en referencia a la ordenanza aprobada y reglamentada que estipula determinadas condiciones de seguridad para los taxis, pero que no se cumple.
Para Giuliano, las razones son varias: tanto porque el propio municipio no la exige, como por la resistencia a la norma que ejercen algunos grupos de taxistas (por ejemplo, respecto del uso obligatorio del GPS, el radiollamado o la incorporación de un blíndex separador entre el chofer y los pasajeros).
"Nuestro planteo es que más allá de este larguísimo debate, la grave situación de inseguridad continúa, por lo que hay que darse un tiempo muy acotado para hacer cumplir la norma", dijo Giuliano.
Pero es claro que aun con esas medidas no se esfumará el problema. "Es un error pensar que la seguridad se puede fragmentar: que hay una para taxistas, otra para escolares, otra para serenos", sostuvo el edil, por lo que se necesita un "plan integral que evidentemente en la ciudad no está funcionando".
Los corredores seguros "son totalmente espasmódicos, se cumplen según la temporada y después se abandonan", afirmó, sin contar con que "cada vez se percibe mejor que una parte de las fuerzas federales ya se fue de Rosario y la otra está haciendo las valijas". Por eso, reclamó, "la provincia debe trabajar muy fuerte para el día después, con un plan donde las fuerzas propias sean protagonistas".
Los choferes también hacen números
El estudio de costos que en forma privada realizó la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti) y que la llevará a pedir formalmente un 34 por ciento de aumento en la tarifa encontró apoyo, pero con reparos, en el sindicato que agrupa a los choferes.
“Es verdad que existe un atraso tarifario”, aseguró ayer su secretario general, Horacio Boix, para señalar la sensación de paradoja que —algunas veces en voz alta, otras en voz baja— circula bastante entre los taxistas. “La realidad es que a veces esos incrementos en las tarifas no llegan a los trabajadores porque cobran por porcentaje y, al encarecerse el viaje, los pasajeros suben menos”, reconoció.
Obviamente que si las cámaras empresarias salen a reclamar al Ejecutivo municipal un retoque en la tarifa, los choferes irán a su vez por una nueva discusión paritaria. De hecho, el plan es pedir que se convoquen a partir de la semana próxima.
Boix adelantó que en esa negociación solicitarán a los titulares de las licencias que aumente el porcentaje destinado a los peones. Si hoy la mayoría recibe un 30 por ciento de la recaudación diaria, el planteo será pasar al 35% y que a partir de las 8 horas de trabajo todo el resto se considere extra y se pague al menos un plus de 50 pesos por turno.
Fein espera el estudio de costos
La intendenta Mónica Fein reconoció ayer que el pedido de aumento de la tarifa del taxi tiene lógica porque “la inflación impacta en los costos de la actividad”, aunque de inmediato advirtió que se debe esperar el estudio de costos que realiza el Ente de la Movilidad para analizar si es viable un posible incremento de la tarifa.