Hace un año el concejal de Arroyo Seco Miguel Angel Coradini ganó espacio en los
medios nacionales al declarar públicamente que a los menores delincuentes había que "molerlos a
cintazos". Y ahora seguramente estará preparando su cinto para darles el merecido que él piensa a
los chicos que entraron a robar a su casa de la localidad donde preside el Concejo Municipal.
Los ladrones violentaron una reja e ingresaron por la cocina del domicilio para
huir llevándose un televisor LCD de 32 pulgadas y un equipo de audio. Aunque horas más tarde, la
policía recuperó el LCD que había sido vendido a una vecina del mismo barrio en 200 pesos y que
terminó con una causa por encubrimiento. También detuvieron a los presuntos asaltantes: de 15 y 18
años.
Coradini vive en una casa de calle Miramar, en el barrio Playa Hermosa de Arroyo
Seco, ciudad ubicada a 30 kilómetros al sur de Rosario. El martes, cerca de las 22, el edil se
comunicó con la policía para denunciar que una de las rejas de su vivienda había sido violentada y
que alguien se había llevado los electrodomésticos.
A partir de ese momento los efectivos de la Inspección 6ª comenzaron a trabajar
sobre información brindada por un vecino y pusieron la mira en un menor de 15 años al que apodan
Tukita, que tiene antecedentes prontuariales y que reside cerca de la casa del edil.
Efectivos del Comando Radioeléctrico llegaron entonces a la casa de Tukita y se
lo llevaron preso tras entrevistar a la madre del menor. Ahí el pibe, que tiene en su haber al
menos tres ingresos en la comisaría por hechos de amenazas, daño y portación ilegal de arma de
fuego, admitió que había participado del robo y del cruce de testimonios surgió otro apodo: El
Boliviano. Un muchacho de 18 años que vive a seis cuadras de la casa escruchada y que no tiene
antecedentes. En cuestión de horas el joven también fue tras las rejas.
Jaqueados por la presión de los pesquisas, los acusados contaron parte de la
ruta de los objetos robados. Así se pudo dar con el LCD de 32 pulgadas que por 200 pesos le habían
vendido a una mujer de 34 años, vecina del edil, quien indicó que había comprado el televisor de
"buena fe" pero quedó acusada de encubrir el hecho. Del equipo de música ni noticias.
Tukita agregó un antecedentes a su prontuario y desde el juzgado de Menores 4ª
se ordenó que quedara con un arresto domiciliario de 48 horas. El Boliviano, identificado como
Ezequiel G., de 18 años, quedó detenido acusado de robo calificado. Y Marcela G., la vecina que
compró "de buena fe" el televisor, fue encausada por el encubrimiento del robo, aunque recuperó la
libertad.