Alberto Ariel Luna, el hincha de River Plate que se incriminó como el homicida de Gonzalo Acro en agosto de 2007, fue detenido en las afueras de Roma, donde se encontraba con pasaporte falso.
Alberto Ariel Luna, el hincha de River Plate que se incriminó como el homicida de Gonzalo Acro en agosto de 2007, fue detenido en las afueras de Roma, donde se encontraba con pasaporte falso.
El sospechoso de la muerte del barra brava fue arrestado por personal de la Policía Federal y de Interpol Italia, y quedará a disposición de la Justicia argentina. Por el momento, Luna quedó detenido en Roma y ya se inició el proceso de extradición, aunque también podría cursarse su deportación por poseer pasaporte falso.
Luna fue acusado como el asesino de Acro. La incriminación la hizo Osvaldo Matera, quien también fue herido de bala la noche del 7 de agosto, en el barrio porteño de Villa Urquiza, cuando acompañaba a la víctima.
Al momento de la detención, en el mediodía romano del miércoles, Luna portaba "un pasaporte falso, a nombre de Francisco Martínez Rivera y estaba en compañía de quien dijo era su mujer, de nombre María Intriago", revelaron los voceros, que recordaron que Luna se había declarado como autor material de la muerte a balazos de Acro, de manera personal y sin vincular a la barra de River Plate.
El 26 de noviembre pasado, Luna se autoculpó de este crimen en un video grabado en la clandestinidad, pero definió al hecho como una disputa común entre barras en la que él actuó defensivamente al ser atacado por la víctima. "Soy Ariel Luna y decidí hacer esto porque estoy podrido de que hagan una historia de lo que pasó. Toda la vida fui y seré de la calle y tengo códigos", sostiene en el video.
Posteriormente, limita la acción a una puja propia de sectores opuestos de la barra (Schlenker versus Rousseau) "porque empezaba el campeonato y tanto ellos como nosotros estábamos viendo qué hacía el otro grupo, cuántas piernas se juntaban, si iban a ir a la tribuna, qué sé yo, varias cosas, las que pasan día a día en una cancha", indicó entonces Luna para cerrar que el desenlace mortal fue "cuando él se me vino encima, forcejeamos y pasó lo que pasó".