Hartos de estar hartos, los olímpicos rosarinos Miguel Albarracín (judo), Jorge Balliengo
(atletismo) y Sandro López (lucha) expresaron su malestar por la política deportiva del gobierno
municipal. Aseguran que esa sensación es compartida por los demás atletas de elite y le apuntan al
director de Deportes de Rosario, Rolando Dal Lago, porque consideran que no los tiene en cuenta.
Los deportistas fueron descargando sus quejas y en primer lugar se
refirieron a las becas deportivas. “La Municipalidad nos da 120 pesos, una cifra
insignificante que paga durante nueve meses al año. Hace unos 10 años que no se incrementa”,
dijo Albarracín, olímpico en Atenas 2004 y Beijing 2008.
“En la gestión anterior de César Blanco se nos pagaba en término y
hasta se nos otorgaba un subsidio cada tanto. Ahora eso no ocurre y hasta hay atrasos en las becas.
Pero no hablamos solamente de dinero. Acá hay una gestión que no tiene en cuenta a los olímpicos,
casi no existe diálogo y ni siquiera se nos da un lugar mínimo e indispensable para
entrenar”, afirmó Balliengo.
Días atrás, el lanzador de disco anunció que abandonaba el atletismo
porque los mosquitos que había en el estadio municipal le impedían entrenar. “Ofrecí dinero
para que fumiguen y la respuesta fue que no tenían personal. Cuando salí a hablar en los medios se
cortó el pasto y se fumigó. Es increíble”, declaró el atleta olímpico de Beijing y dueño del
récord sudamericano.
“Al judo se le prometió la colocación de un tatami internacional
(superficie para competir), pero como no se cumplió debo entrenar todas las semanas en Buenos
Aires. No se tiene en cuenta que el judo rosarino dio varios olímpicos a la ciudad”, dijo
Albarracín.
También les molesta la falta de diálogo con el director de Deportes.
“A mí sólo me llamó para los Juegos de Beijing. Seguro cree que estoy retirado, pero compito
para la selección de lucha y seguramente viajaré a los Juegos Odesur de 2010”, dijo López,
quien participó como judoca en los Juegos de Seúl ’88, Barcelona ’92 y Beijing
’08.
“Si bien estoy en el final de mi carrera, tanto a mí como a los
demás olímpicos se les podría ofrecer que colaboremos para el desarrollo del deporte y que no se
desperdicie todo lo que aprendimos”, agregó.
“Desde la Dirección de Deportes se escudan en que son los
encargados del deporte social y no del alto rendimiento, y que para eso está la Nación y la
Provincia. Pero, ¿por qué desde hace años venden humo con la creación de un Centro de Alto
Rendimiento?, ¿por qué fueron sponsors de la exhibición de Del Potro y piensan organizar el Mundial
de hockey? Está bien que lo hagan, pero entonces ¿por qué no tienen en cuenta a los deportistas de
acá?”, se pregunta Balliengo.