Denuncias por amenazas hacia la conducción del gremio por parte de choferes
disidentes; dos detenidos, uno de cada lado; mensajes intimidatorios a celulares; conferencias de
prensa; acusaciones y defensas; ataques y contraataques. Este es el clima que están viviendo hoy
muchos de los 3.200 afiliados del Sindicato de Peones de Taxis que encabeza desde hace 17 años
Horacio Boix, quien empieza a recibir cuestionamientos por su liderazgo en un clima cada vez más
violento y enrarecido. En el medio, un patrimonio gremial de 3 millones de pesos que exalta los
ánimos de algunos tacheros.
El fuego cruzado se disparó supuestamente tras la volanteada de un grupo de
afiliados que formaron sus propias listas (la "17 de Octubre" y la "7 de Mayo") críticas a la
conducción de Boix. Pero, algunos a viva voz y otros pidiendo que se preserve su identidad "por
miedo a represalias", sostienen que lo que exasperó los ánimos no fueron los panfletos ni las
próximas elecciones programadas recién para 2011. "Lo que está en juego en este gremio es un manejo
de años poco transparente y un accionar autoritario: hay compras fraguadas, asambleas truchas y el
servicio de salud con problemas", dijo el titular de la lista "17 de Octubre", José Salum.
"Hace tres años que nos enfrentamos a esta conducción gremial. Hasta las últimas
elecciones las hicieron cuando quisieron, el estatuto brilla por su ausencia y al sindicato entra
quienes ellos quieren", agregó en la misma tónica Mario Lapesa, de la "7 de Mayo".
"Infamia". Boix, secretario general del gremio local y adjunto de la Federación
Nacional de Peones de Taxis, por lo que muchos lo llaman aquí "el segundo de (Jorge Omar) Viviani",
dialogó con La Capital.
El gremialista negó todas las acusaciones, dijo que eran "una infamia", anunció
que en menos de diez días "se realizará una asamblea informativa donde se presentarán todas las
cuentas del sindicato, los últimos tres balances, las cuentas bancarias" y remató: "Nosotros, hace
15 años, de la nada levantamos este sindicato que tiene un patrimonio de 3 de millones de pesos
bien administrados. Ellos (por las listas opositoras) ni estaban. No tenemos un derecho adquirido,
pero hicimos un buen trabajo. Por eso tenemos una casa, ahora compramos otra (en Salta al 2800) por
1.100.000 pesos que refaccionaremos a partir de octubre por 1.500.000 pesos. Además tenemos tres
autos del sindicato...".
—¿Son los tres que en el parte policial del miércoles pasado figuraban como
conducidos por quienes amenazaron a un grupo de taxistas disidentes?
—Sí, pero nosotros no amedrentamos a compañeros, no es nuestra
característica. No estamos para asustar a los taxistas sino para defenderlos. Esos autos estaban
controlando los corredores seguros con la policía y la Guardia Urbana Municipal.
Encontronazo. El diálogo hace referencia al episodio del miércoles pasado que
terminó con el primer detenido de la semana, en la comisaría 2ª. Nelson Ariel C., de 44 años, fue
reconocido por varios taxistas como quien los había amenazado minutos antes. El hombre circulaba en
una moto negra Yamaha sin dominio cuando dos taxistas lo reconocieron como uno del grupo de siete
colegas que a bordo de tres autos ("Chevrolet Astra, color oscuro; Renault 18, color ladrillo y un
Megane gris", detalla la denuncia policial) les profirieron amenazas en la estación de servicios de
Mitre y Zeballos.
La causa se tramita en el Juzgado Correccional Nº 5. "Querían saber sobre los
responsables de los panfletos, dijeron que nos iban a prender fuego los autos y romper los
tobillos", había dicho Sergio Giacopetti, uno de los denunciantes.
Más detenidos. Las acusaciones siguieron. Los amenazados señalaron al detenido
como barrabrava y lejos de tranquilizarse los ánimos con la intervención de la Justicia, se
caldearon. Uno de los choferes del grupo disidente, y supuestamente amenazado, se presentó el
jueves en el local sindical de Presidente Roca 1738 "munido de un trozo de hierro", según se
denunció. Ese fue el segundo detenido: Gustavo Daniel B., de 37 años, quien por golpear a empleados
del sindicato y patear las puertas del lugar quedó demorado en la seccional 5ª.
Y no fue lo único. También el jueves por la noche, Giacopetti presentó una
denuncia en la comisaría 3ª por una supuesta amenaza telefónica. Y el viernes por la mañana el
grupo damnificado ofreció una conferencia de prensa en la parada tradicional de Alvear y Brown.
Algo es seguro, el hecho de que existan tres listas de taxistas evidencia
pluralidad, algo que parece incomodar y generar encontronazos en un gremio que sabe de peleas.
Un grupo de taxistas opositores a la actual conducción se reunió el viernes
pasado en Alvear y Brown.
jose enrique granata / La Capital
Boix, titular del sindicato.