La presidenta Cristina Fernández de Kirchner ratificó anoche a la cúpula de la CGT oficialista la postura del gobierno de mantener el esquema de acuerdos paritarios por un año de duración.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner ratificó anoche a la cúpula de la CGT oficialista la postura del gobierno de mantener el esquema de acuerdos paritarios por un año de duración.
Lo hizo durante una reunión que mantuvo en la residencia de Olivos con el secretario general de esa central, Antonio Caló, quien asistió acompañado por el titular de Peones de Taxis, Omar Viviani, el de Smata, Ricardo Pignanelli y el de Obras Sanitarias, José Luis Lingeri.
"Tratamos con la presidenta la discusión de paritarias y nos dijo que deben hacerse en el marco del convenio colectivo de trabajo", sostuvo Lingeri al retirarse de la quinta de Olivos.
Fuentes gremiales señalaron además que la mandataria "preguntó a los sindicalistas si estaban en condiciones de pautar salarios por un año" y luego de un intercambio de opiniones, aclaró que para la Casa Rosada son "anuales" y no por tramos como reclaman algunos gremios.
De todos modos, Cristina también escuchó las demandas sindicales especialmente la preocupación por el tema laboral a raíz de las últimas suspensiones en distintas empresas que está modificando el mapa del empleo.
Uno de los líderes sindicales presentes en el encuentro señaló que "lo importante es que sigue abierta una mesa de conversaciones, de diálogo y de buscar en conjunto una alternativa para una situación que es un reclamo del conjunto del movimiento obrero".
Rechazó hablar de porcentajes a la hora discutir los aumentos salariales, en el marco de las paritarias, y pidió que "no hagamos futurología", a la vez que opinó que "de nada sirve sacar un 35 por ciento o 40 por ciento y quedarnos sin fuentes de trabajo".
Si bien Cristina fue taxativa sobre la decisión oficial de no estar de acuerdo con las paritarias de corto plazo, se conoció que los miembros de la conducción de la CGT pidieron a la jefa de Estado no fijar topes a la discusión salarial y se volvió a hablar de la posibilidad de lograr para los trabajadores una suma fija no remunerativa a cuenta de "futuros" aumentos a considerar.
También le expresaron su "preocupación" por el tema laboral. Los sindicalistas señalaron que "por la incertidumbre" generada en materia de precios de los autos de alta gama y debido a las dificultades que se esta registrando con la provisión de piezas y partes importadas, comenzó un proceso de suspensiones que involucra a cientos de trabajadores de las plantas automotrices.
El encuentro se dio en medio de una agenda pendiente con reclamos sindicales que incluyen además las deudas con las obras sociales, el impuesto a las ganancias, asignaciones familiares, entre otros pedidos. Además, desde los gremios expresaron su "preocupación" por las recientes medidas económicas que podrían deteriorar la situación del empleo, generando más suspensiones o despidos de trabajadores; así como la remarcación de precios y la devaluación.
Fueron excluidas de la convocatoria las centrales obreras opositoras con la Casa Rosada: la CGT de Hugo Moyano; la CGT Azul y Blanca, de Luis Barrionuevo, y la CTA, de Pablo Micheli.
Precios. Durante el encuentro Cristina pidió a los gremialistas que se comprometan a respaldar el acuerdo de Precios Cuidados lanzado por el gobierno nacional.
Suma fija
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, rechazó ayer la posibilidad de que se otorgue una suma fija como adelanto en las negociaciones salariales y ratificó que las paritarias se desarrollarán anualmente, tal como se vienen realizando en los últimos años. “Las paritarias se desenvolverán tal cual se pudieron ejecutar durante los últimos diez años”, dijo.