Cristina comparó los fondos buitre con las "ratas del Riachuelo"

La presidenta Cristina Fernández comparó ayer a los fondos buitre con las "ratas del Riachuelo", advirtió que "acechan" desde afuera para "interrumpir" el modelo económico y político, y aseguró que gobernará hasta el 2011.

"Esta presidenta no tiene enemigos porque me voy en el 2011 y vendrá otro, pero les puedo asegurar que esos intereses están al acecho para volver a la vieja Argentina", advirtió la jefa del Estado.

La presidenta habló en un acto realizado en el municipio bonaerense de Lanús, tras visitar obras que llevan adelante cooperativas inscriptas en el Plan Argentina Trabaja.

En ese contexto, criticó una vez más a la oposición y también cuestionó a la Justicia, al remarcar que aún se investiga "un vergonzoso megacanje" y comparó esa lentitud contra la celeridad de los fallos que frenaron el uso de reservas monetarias para pagar deuda pública y la remoción de Martín Redrado en la conducción del Banco Central.

"Qué raro, cuando se pagan tasas del 15 o 20 por ciento no hay juez que investigue, cuando se quieren pagar menos intereses, allí intervienen para impedir que se constituyan esos fondos para pagar menos intereses. Qué Argentina tan extraña la nuestra", reflexionó.

La jefa de Estado expresó que "duele mucho como argentina ver como políticos u otros sectores mediáticos hacen el juego" a los fondos buitre, y manifestó que "siento que no han entendido lo que es representar los intereses del país".

El blanco principal de la presidenta fueron nuevamente los denominados fondos buitre, a los que acusó que querer "apoderarse de los fondos de los argentinos", luego del embargo que trabó ayer el juez norteamericano Thomas Griesa sobre reservas del Banco Central depositadas en la Reserva Federal de Estados Unidos.

La mandataria explicó que a esos fondos se los llama "buitres" en alusión a "esos pájaros de alas negras que comen carroña, que comen carne muerta".

"Se los llama buitre porque están esperando que los países caigan en desgracia, no puedan pagar su deuda, y caigan en default. Compran esos títulos por monedas, y después pretenden que se les devuelva el valor nominal. Van sobre países al borde del abismo y de la muerte como estuvimos en el 2001", graficó.

También los comparó con "las ratas del Riachuelo", y aseveró que se los puede "combatir" con "buenas políticas" y con "perseverancia", y con la defensa de los intereses nacionales "a rajatabla".

"Alguien me decía que habían limpiado de ratas el Riachuelo, y me hizo acordar a los buitres, a esos que una vez más acechan desde afuera a los argentinos para interrumpir un proceso político y económico", enfatizó.

En ese sentido, señaló que en 2001 los argentinos estaban "en el suelo" pero recalcó que "afuera hicieron muy buenos negocios los que se llevaron el dinero de los argentinos", y alertó que los fondos buitre de ahora "son los mismos" que los de antes.

La mandataria también consideró que actualmente "no hay deuda ilegítima" porque fue avalada "por el primer gobierno democrático", y las posteriores gestiones, saliendo así al cruce de algunos referentes de la oposición que impulsan un debate de esa cuestión en el Congreso.

"He escuchado a algunos hablar de deuda legítima o ilegítima. El momento de analizar si la deuda dejada por la dictadura era legítima o ilegítima era durante el primer momento democrático. Una vez que el primer gobierno democrático y los posteriores reconocieron la deuda no hay manera de hablar de deuda ilegítima, por más que suene lindo y algunos lo agiten como un slogan electoral", planteó.

López Murphy compara. Por su parte, Ricardo López Murphy comparó ayer al matrimonio presidencial con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, y con los hermanos Alberto y Adolfo Rodríguez Saá porque a su entender "confunden gobierno con Estado" y alertó que "esa confusión ocurre en gobiernos totalitarios, no en democracias".

"La presidenta, (el jefe de Gabinete) Aníbal Fernández, (el ministro de Economía, Amado) Boudou y compañía desconocen que las reservas son del Estado", afirmó el ex funcionario de la Alianza.

López Murphy rindicó que "no sólo el kirchnerismo tiene esta grave confusión, porque tanto Macri como los Rodríguez Saá piensan que el partido político, el gobierno y el Estado son la misma cosa, uno lo puede ver con mucha claridad en la publicidad oficial que realizan".