La presidenta Cristina Fernández llegó de su gira internacional dispuesta a retomar la iniciativa en temas clave que suman tensiones a su administración, como el alza de precios y la discusión paritaria.
La presidenta Cristina Fernández llegó de su gira internacional dispuesta a retomar la iniciativa en temas clave que suman tensiones a su administración, como el alza de precios y la discusión paritaria.
En su primer acto en Casa de Gobierno tras permanecer más de una semana fuera del país, la jefa de Estado buscó atender las cuestiones que más le preocupan a los argentinos, según las encuestas, ya que trató temas económicos incluidos al tope en los habituales sondeos de opinión pública.
Su primer mensaje estuvo dirigido a la dirigencia gremial, que viene reclamando aumentos del 25 por ciento para arriba en las paritarias, pero antes exige que el gobierno eleve el piso a partir del cual los empleados comienzan a tributar ganancias.
El reclamo salarial y el tema ganancias unifica, con diversos matices, a las dos CGT, tanto la oficialista dirigida por el metalúrgico Antonio Caló, como la opositora liderada por Hugo Moyano.
Entre esos matices, los gremios más afines a la Casa Rosada exigen incluso que primero se suba el piso de ganancias, para después tener un panorama más claro sobre el nivel de aumento salarial a reclamar.
Los sindicatos bajo el ala de Moyano directamente reclaman la eliminación de ganancias para los empleados en relación de dependencia, porque consideran absurdo que un trabajador deba pagar impuestos sobre su remuneración.
El problema para los gremios es que ganancias tiene una relevante participación en la recaudación impositiva, y por ahora el Ejecutivo no dio demasiadas señales sobre su voluntad de efectuar cambios, y mucho menos eliminarlo en el caso de los salarios.
La presidenta envió un mensaje a los sindicatos para que cierren los acuerdos y les recordó la desocupación récord en España, al sostener que los argentinos somos "afortunados".
La puja entre salarios y precios, uno de los males que la Argentina sufrió en distintos momentos de su historia, protagoniza el arranque del 2013 y amaga crear conflictos de difícil resolución.
La inflación, un tema que casi no fue abordado por la jefa de Estado durante su primer gobierno y casi todo el primer año de su segundo mandato, mereció alusiones en su dos últimos discursos.
Pero la jefa de Estado pareció transferir la responsabilidad de ser celadores de precios a usuarios y consumidores, a quienes les pidió que "manejen su poder" y les "hagan el vacío" a quienes aumentan en forma exorbitante los precios.
El problema es cuando lo que aumenta periódicamente integra la canasta básica de alimentos, bebidas y productos de limpieza, un grupo de productos a los cuales es difícil hacerles un "vacío".
"Hay que empezar a manejar nuestro poder de usuarios y consumidores. No boicot, pero sí hacerles el vacío para que se den cuenta. Porque si no te defendés vos no te defiende nadie", dijo Cristina.
El razonamiento presidencial también podría leerse como la admisión de que el Estado poco y nada ha podido hacer para evitar los excesos en las remarcaciones, a pesar de la estrategia del garrote implementada por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
Es que las periódicas "apretadas" de Moreno a los formadores de precios parecen haber terminado por desgastar al funcionario, al que los ejecutivos de las grandes compañías le habrían tomado el tiempo para remarcar igual y escapar a la influencia de sus gritos cada vez menos convincentes.
Evita sacará de circulación a Roca
La presidenta de Casa de Moneda, Katia Daura, anticipó que a fines de febrero comenzará a llegar al país el papel para imprimir masivamente y durante todo el año los billetes de 100 pesos con la imagen de Evita y sostuvo que “para 2015, estamos deseosos de que ya no haya más (billetes con la imagen de) Roca dando vueltas”.
La funcionaria señaló, tras integrar la comitiva que acompañó a la presidenta Cristina Fernández en su reciente visita a Emiratos Arabes Unidos, Indonesia y Vietnam, que ya no se imprimen más papel moneda con el retrato del ex presidente (1880-1886) Julio Argentino Roca en el frente y que reproduce en el anverso el cuadro de Juan Manuel Blanes titulado “La conquista del desierto”.
Roca, precisamente, encabezó a fines del siglo XIX la controvertida y cruenta campaña militar contra los pueblos originarios que poblaban el territorio del sur de la provincia de Buenos Aires y la Patagonia, y abrió paso a la explotación agropecuaria de las tierras así incorporadas por la élite porteña.
Daura aclaró que la circulación del billete tradicional “va a depender de la demanda del público y de sus tenencias”.
La funcionaria explicó que “las licitaciones para el papel las realiza el Banco Central, y por lo general viene de Europa, de una empresa instalada en París”, e insistió en que “vamos a trabajar fuertemente para sacar a (el billete de) Roca del mercado”.
En cuanto a los resultados de sus entrevistas en Oriente, Daura precisó que “en Emiratos estuvimos con el hermano del príncipe heredero, que nos comentó que pese a contar con muchos recursos aún no pueden imprimir su propia moneda”.
“Ellos —dijo Daura— tienen intenciones de montar su propia Casa de Moneda y quedamos en hacer un acuerdo para transmitirle conocimientos y asesorarlos”.
“El príncipe nos planteó que siempre están a merced de los proveedores de equipos y tecnología, y que para ellos es muy importante contar con experiencias estatales como la nuestra”.
En Indonesia, explicó Daura, “también estuvimos en Casa de Moneda y acordamos con sus directivos una visita a la Argentina en marzo y abril próximos, para firmar un acuerdo de colaboración.