El titular de la Corte Suprema dejó en claro que hay cuestiones pendientes que se articulan con el gobierno provincial para dar respuesta a distintas demandas. Destacó la necesidad de que haya jueces “más activos y protagonistas de los procesos”, y reconoció “demoras históricas” en juzgados laborales. “Tenemos una deuda. Todavía todo está muy papelizado. Necesitamos implementar la oralidad. Los procesos duran mucho”, aceptó Roberto Falistocco.
El funcionario se refirió a que en el fuero laboral todavía no se implementó la ley Nº 13.840, aprobada en diciembre de 2018 y reglamentada en enero de 2019 por el ex gobernador Miguel Lifschitz, pero que quedó en veremos por la transición política.
Esta norma “establece instancias parecidas a las causas civiles, que darían buenos resultados. Si el Ejecutivo no tiene un proyecto distinto, que sería razonable, debería ponerse en marcha. Habría que designar jueces de conciliación y llamar a concurso para cubrir los cargos. Entendemos que se está pensando un proyecto distinto; si es para mejorar, bienvenido sea, pero mientras tanto esta ley apuntaba a un cambio”
De acuerdo a un relevamiento de la Corte, “por la adhesión de la provincia a la ley de riesgos de trabajo ha bajado el número de expedientes laborales”, precisó el titular de la Corte. Por eso, estimó que el momento actual es “propicio para intentar un cambio”. Según los últimos datos, en 2019 hubo un pico de 22.000 expedientes: “Un obrero no puede esperar tantos años para la resolución de un conflicto. Una causa tarda seis años en promedio”.
Sobre los juzgados de Familia, indicó que es uno de los fueros más requeridos, y “donde más respuesta se exige. La gente se va en tiempos razonables con una respuesta, sobre todo las medidas de prohibición de acercamiento”.
Pero, ante la complejidad de los casos, propició “una estructura distinta en materia de violencia de género y de violencia familiar. Aspiramos contar con un equipo interdisciplinario a la altura de los conflictos que se plantean, donde están en juego los niños y las mujeres, que generalmente son las víctimas”.
Según Falistocco, el juez depende de relevamientos ambientales y personales que hagan esos profesionales. “Es lo que necesitan para resolver conflictos tan delicados. Faltan trabajadores sociales, psicólogos, psicopedagogos, psiquiatras infantiles. Hay mucho conflicto de salud mental. Tuvimos conversaciones y es probable que tengamos esos cargos en corto tiempo”.
El Poder Judicial espera que en toda la provincia se cubran vacantes de 49 cargos de jueces. Según indicaron en la Corte, hay 14 concursos terminados pero hay demoras para considerar los pliegos.